Senayangba Chubatoshi Jamir era el huésped de honor. Participaron tres mil personas. Los católicos en todo el Estado son casi un millón, marcados por años de persecución. “No olviden a quien no tiene refugio, comida, ropa, mientras nosotros no nos alegramos de nuestra abundancia”.
Bhubaneshwar (AsiaNews) – La iglesia es el gobierno de Orissa se encontraron para intercambiarse los augurios de Navidad. Unas tres mil personas entre gobernantes locales, representantes eclesiásticos, jóvenes, niños y fieles se reunieron en Rabindra Mandap, en la capital estatal. Huesped de honor fue Senayangba Chubatoshi Jamir, jefe de ministros del estado y su esposa Alemal Jamir. Después de haber agradecido a los católicos por la invitación, el gobernador afirmó: “La Navidad es una fiesta universal. Todos participan enviando saludos, postales de augurios e se intercambian dones. Esta fiesta no pone barreras a la práctica del amor.
El evento es aún más significativo si se considera que en 2008, Orissa fue teatro de la más violenta persecución contra los cristianos en India. Hasta ahora las víctimas de los pogromos están en espera de justicia y los culpables están libres, mientras que en la cárcel languidecen siete cristianos detenidos con falsas acusaciones. La Iglesia se bate de hace años para que vengan indemnizadas por las propiedades destruidas por la furia de los extremistas hindúes y recientemente la Corte suprema de india estableció compensaciones para los sobrevivientes y bienes privados (pero no para las iglesias).
En Orissa vive cerca un millón de católicos (sobre más 43 millones de habitantes, Ndr). Los festejos iniciaron cantando el himno nacional y continuaron con danzas y exhibiciones musicales. Para el período de Navidad, el jefe de ministros invitó a no olvidar a “quienes no tienen refugio, comida, ropas, mientras que nosotros nos alegramos por nuestra abundancia”. “La celebración de Navidad-continuó. No tiene sentido si somos sordos frente al llanto del pobre, ciegos frente a la miseria, no ocuparse de los necesitados”.
El gobernador subrayó que “mientras el mundo celebra el nacimiento del Príncipe de la paz, esta Navidad 2016 debe ser la ocasión o el privilegio para cualquiera de recordarse del vecino, del anciano, de la persona sola, necesitada, pobre, oprimida, olvidada, sin esperanza de nuestro Estado y en el país en general. La paz no es ausencia de guerra, sino presencia de atención, atención y simpatía”.
Invitando a los presentes a ser “agentes de paz y amor”, él espera que la Navidad “signifique todavía solidaridad entre todos. Me auguro que en toda Orissa las familias se reúnan, las relaciones rotas sean sanadas, la alegría ilumine nuevamente de nuevo el corazón de las personas sufrientes, aterrorizadas por accidentes, ataques terroristas, calamidades naturales, pérdida de sus queridos o que viven bajo constante amenaza por sus vidas”.
“Mi esperanza-concluyó-es que lleguen días mejores y la paz reine en cada familia y en toda la nación india. Difundan la palabra y las semillas del mensaje de la Navidad. Ayuden a los pobres, los desventajados y los más vulnerables”.