Manila estudia exploraciones conjuntas con Beijing en el Mar de China meridional

Hace tiempo divididas por el control de los mares de la región Asia-Pacífico, Filipinas y China podrían emprender una asociación estratégica. Manila está a la búsqueda de nuevas fuentes energéticas y de inversiones externas para relanzar su economía. El objetico es “normalizar” las relaciones con Beijing, tras años de tensiones.  


Manila (AsiaNews/Agencias)  – Las Filipinas están “estudiando seriamente” la posibilidad de promover una exploración conjunta con Beijing en el Mar de China meridional, en una búsqueda de recursos naturales. Hace tiempo divididas por el control de una amplia porción estratégica en la región Asia-Pacífico, las dos naciones podrían dar vida a una asociación de tipo estratégico, confirmando –una vez más- el progresivo alejamiento de Manila de los Estados Unidos.  

Según lo referido por el nuevo embajador filipino en China, José Santiago Sta. Romana, el departamento de Energía y de Asuntos exteriores están evaluando algunos estudios de factibilidad relativos a iniciativas conjuntas. Para Manila es esencial descubrir reservas de energía alternativas, dado que las provisiones de gas natural de Malampaya debieran disminuir en forma drástica en los

Otrora dispuesta a dar batalla en la ONU para reivindicar sus derechos sobre los mares, hoy, Manila –bajo la presidencia de Duterte- prefiere allanar las disputas mediante encuentros cara a cara (según la línea caldeada de Beijing) y así atraer inversiones de empresas chinas. La plana de líderes de Manila dice estar abierta a “exploraciones conjuntas” con China en el Mar de China meridional y tener la intención de “normalizar” cada vez más las relaciones con Beijing.

Las palabras del nuevo embajador en China confirman una línea que ya fuera expresada hace tiempo por el presidente filipino Rodrigo Duterte, que en octubre pasado supo realizar una visita oficial a Beijing.  En el contexto de la misión diplomática en tierra china, orientada a fortalecer la economía de las Filipinas, el jefe de Estado subrayó el cambio de rumbo en materia de política exteior introducido desde el inicio de su mandato. Duterte afirmó que quería bajar el nivel de “relaciones demasiado estrechas” con Washington y mejorar el diálogo con Beijing.

 “Los chinos siempre han considerado a las Filipinas como una pieza de juego a nivel geopolítico o como un caballito de Troya de los Estados Unidos.  Ahora nos miran como un vecino amigable”. Por otro lado, China no se inmiscuye en los asuntos internos de otro país y se cuida bien de expresar críticas a la lucha sanguinaria emprendida por el presidente Duterte contra los narcotraficantes y los tóxico-dependientes, a diferencia de lo que ha hecho estados Unidos recientemente. Una guerra que incluso está condimentada con ejecuciones sumarias y homicidios extra-judiciales, que han atraído incluso la condena de conferencia episcopal filipina.