Enero sigue siendo el "mes negro" para el periodismo en Sri Lanka
de Melani Manel Perera

Periodistas y activistas recuerdan a su colega Prageeth Eknaligoda, desaparecido el 24 de enero de 2010. En las elecciones que han decretado la victoria del Rajapaksa, él apoyaba al opositor Fonseka. Su mujer señala con el dedo a la supuesta connivencia entre el ejército y el actual presidente Sirisena.


 

Colombo (AsiaNews) - Incluso bajo el gobierno del presidente Maithripala Sirisena, enero es el "mes negro" para el periodismo. Lo afirman a AsiaNews los miembros de la asociación de los periodistas de Sri Lanka, hablando de compañeros que desaparecieron durante los últimos años y nunca devueltos a sus familias. En particular, recordaron a Prageeth Eknaligoda, el periodista y caricaturista político desaparecido el 24 de enero del 2010. Desapareció en la víspera de las elecciones que marcaron el triunfo de Mahinda Rajapska sobre el general Sarath Fonseka. Prageeth trabajaba para una revista en línea independiente que apoyaba la candidatura de Fonseka, y por esto la familia ha acusado siempre a los sostenedores de Rajapaksa de haber organizado el sequestro. Sandhaya Priyangani Eknaligoda, esposa del periodista, dice: "Desde el primer día he tenido la creencia de que su secuestro es obra de Rajapaksa. Él y su hermano Gotabhaya son responsables".

Al igual que antes, también este año el país celebra el "Enero Negro" para recordar los asesinatos, desapariciones forzadas, incendios y violencia que sufren los periodistas y trabajadores de los medios. Decenas de periodistas y activistas se reunieron frente a la Foundation Institute y al Library Council de Colombo para recordar Prageeth y pedir al actual presidente nombrar una comisión especial para investigar sobre su destino.

De acuerdo con la última información disponible, fue trasladado a una base del ejército y de allí se le trasladó a otro lugar de la costa este. Después ningún rastro. "Vivimos con la esperanza de que aún está vivo - dice su esposa - incluso si el departamento de investigaciones dice que él habría muerto."

La mujer lleva una campaña de sensibilización desde hace años, de manera valiente y corajuda. "No hay tiempo para lágrimas - afirma - de lo contrario perdería fuerza en la investigación."

La esposa del dibujante apunta con el dedo a las investigaciones llevadas a cabo por el gobierno, y observó un cambio de actitud desde que Sirisena fue elegido. Antes de la victoria, se comprometió a realizar un cambio en la investigación. Más tarde criticó el comportamiento de algunos soldados, sospechoso de tener como rehén a Prageeth más tiempo del necesario. "Pero después de unos pocos días - es la queja - fueron puestos en libertad bajo fianza. Este es un claro ejemplo de que los sospechosos tienen el apoyo del Estado".