Cuaresma, tiempo para saciar el hambre y la sed de Dios entre los chinos
de Bodi Jiao

Los desilusionados del materialismo, del consumismo y de la ideología comunista buscan nuevas fuentes espirituales. En las diversas parroquias chinas se organizan cursos para catecúmenos, y también estudios y lectura de la Biblia, adoración eucarística, Via crucis y muchos gestos de caridad.


Beijing (AsiaNews)- “La Cuaresma es tiempo de ayuno, oración, penitencia, pero sobre todo es el tiempo de ocuparse de aquellos que sufren alrededor nuestro, en particular aquellos que tienen hambre y sed de Dios”. Así el p. Zhu introdujo el Miércoles de Cenizas el programa cuaresmal para su parroquia en Changshu, en la diócesis de Suzhou (Jiangsu). El p. Zhu también recordó el mensaje que el Papa Francisco envió a todos los católicos del mundo en ocasión de la Cuaresma.

Los católicos chinos viven una fe más bien tradicional y el período cuaresmal está dedicado a la conversión interior, a la contemplación de la pasión de Jesús (Via crucis), al ayuno y a hacer obras de caridad. Pero justamente éstas últimas tienen un carácter de testimonio y misión, dado que en China es siempre más fuerte el deseo de espiritualidad y de encontrar a Dios. Esto es debido al materialismo y al consumismo que domina la sociedad, como también a la crisis ideológica del partido comunista, que lleva a las personas a encontrar puntos de referencia en sus vidas.

Por esto en muchas parroquias hay cursos de catecismo que prepararan a decenas de catecúmenos para el bautismo en la noche de Pascua, mientras que los fieles ya cristianos están invitados a redescubrir su propia fe y a comunicarla a sus amigos. Por esto en muchísimas parroquias el tiempo de Cuaresma se organizan cursos en los cuales se profundiza el conocimiento y estudia la Biblia.

En la parroquia de Yixingbu (diócesis de Tianjin) por ejemplo y en aquella de la catedral se tienen cursos de lectura de la Biblia. Lo mismo sucede en las parroquias de LiuJiazhuang y Nandubi (diócesis de Hongdong, Shanxi).

A Dalian (Liaoning) además han elaborado un programa para la formación espiritual, con cursos de teología y de ética que duran también por todo el año.

En la diócesis de Beijing, en Yongning, el p. Zhang Tianlu le interesa proponer un gesto litúrgico de caridad. Así el viernes de Cuaresma a la 17,30 realizan el Via Crucis, pero los fieles son invitados a realizar un gesto de caridad ese mismo día visitando por ejemplo a los pobres, a los enfermos, etc.

En Tongzhou (diócesis de Beijing), el p. Giovanni Yu Taiyong tiene un plan semanal: estudio de la Biblia el lunes, una hora de adoración cada jueves; oración de los jóvenes siguiendo la metodología de Taizé el viernes. Además, todos los días se aconseja realizar visitas a orfanatos, casas para ancianos y para niños, además del ayuno, peregrinaciones y colecta de fondos para los pobres.