Katmandú: Activistas católicas denuncian la trata de mujeres-esclavas
de Christopher Sharma

Las víctimas vendidas como fuente de órganos o como esclavas sexuales para los militantes islamistas. En riesgo, en particular, las pertenecientes a las minorías tamang, rai o thakuri a causa de su piel “bella y clara”. El compromiso del gobierno frenado por los ligámenes de la trata con la criminalidad. Diversos los programas y las manifestaciones organizadas por las asociaciones por los derechos de las mujeres.


Katmandú (AsiaNews)- Para que la jornada internacional de la mujer tenga realmente un significado, su explotación en la trata debe terminar. Es cuánto reafirmado por diversas exponentes católicas por los derechos de las mujeres en Nepal. Clara su denuncia sobre el agravarse del fenómeno: siempre más mujeres nepalesas son explotadas ya sea como esclavas sexuales como en el tráfico de órganos.

Según la Comisión nacional por los derechos humanos, en los últimos dos años al menos 16 mil mujeres fueron salvadas de la trata, mientras que 13 mil fueron traficadas a diversos países.

“La modalidad cambió, “afirma Chandrasekhar Aadikari, un periodista que se ocupó de la cuestión”. “Antes eran vendidas a India y a China como prostitutas, mientras que ahora centenares de mujeres nepalesas son explotadas por militantes islamistas como “mujeres de confortación” o escudos humanos”. “En base a cuánto referido por los medios-agrega- sólo en Siria habría 300 esclavas sexuales”. Según el periodista son sobre todo las pertenecientes a minorías étnicas como los tamang, rai o thakuri a estar en riesgo por causa de su color de piel. “bella y clara”. Shesh Chandtara, presidente de la Comisión nacional para las mujeres, afirma que justamente a causa de esta característica física, ellas se convirtieron en víctimas de un intenso tráfico de órganos: “Su bella piel es amada por muchas personas en el mundo, deseosas de apropiarse con operaciones de trasplante”.

Reafirmando que solamente terminando este fenómeno puede hacer alegre esta jornada, Sujata Rai, activista católica, afirma que “hay muchos otros problemas, incluida la violencia doméstica, las pr+ácticas tradicionales y superticiones y la desocupación. “Sobre todo, según Rai es “intolerable” que, mientras el mundo celebra la fiesta de la mujer, sean miles aquellas condenadas a una vida infernal en los centros de prostitución.

Para una activista, Renu Rajvanadari es importante el rol jugado por las religiones: si las enseñanzas católicas hacen bien a la familia, sostiene, el islam y el hinduismo, con sus tradiciones opresivas, representan un problema.

Kumar Khadka, Ministro para la seguridad social, de las mujeres y de los niños, afirma que el gobierno está haciendo lo posible, pero poner fin a este fenómeno requiere tiempo, sobre todo por los ligámenes que éste tiene con la criminalidad. “Sabemos que sólo pocas mujeres privilegiadas están celebrando este día y miles están llorando y sufriendo mientras nosotras festejamos-declaró- pero para resolver el problema es necesario un esfuerzo colectivo”.

Según Bishnu Lamsal, secretario jefe en el mismo ministerio, “existen los instrumentos legales para contrastar este tráfico, pero es difícil ponerlos en práctica a causa de la falta de conciencia”.

Muchas las organizaciones por los derechos de las mujeres que están subrayando esta jornada a través de programas y manifestaciones. El gobierno de Nepal, mientras tanto, declaró para hoy fiesta nacional.