El Pbro. Rafic Greiche subraya que los terroristas “están robando la alegría de la fiesta”. A pesar del clima de miedo que se vive, ayer las iglesias del país estaban colmadas de fieles. El gobierno declara el estado de emergencia. Es necesario reforzar el trabajo de inteligencia. Y agrega: Es difícil saber cuándo, pero “habrá otros ataques”.
El Cairo (AsiaNews) – En Egipto, la atmósfera es “pesada”, las explosiones y las víctimas de ayer han “proyectado una sombra” sobre las inminentes celebraciones de la Pascua, los terroristas “están robando la alegría de la fiesta”. En esta Semana Santa, la comunidad cristiana “está viviendo la misma pasión que Jesucristo”, con una mezcla de “miedo y tristeza”. Es lo que cuenta a AsiaNews el padre Rafic Greiche, vocero de la Iglesia católica egipcia, al comentar los ataques de ayer ocurridos en Tanta y en Alejandría -que han causado decenas de muertos y más de un centenar de heridos-, ambos reivindicados por el Estado islámico (EI). “A pesar del clima de miedo –prosigue el sacerdote- anoche las iglesias igualmente estaban colmadas de gente. En la mía había más de 2.000 personas presentes, los fieles participaron en las misas; los cristianos se han habituado a la violencia”.
En estas horas se multiplican las reacciones ante las explosiones, ambas reivindicadas por los yihadistas de Daesh [acrónimo árabe para el EI], si bien algunos observadores hablan de una “complicidad” de los Hermanos Musulmanes. “Las medidas de seguridad se han incrementado –explica el padre Rafic- y nosotros, los pastores y responsables de las comunidades, tratamos de mantener una vigilancia estricta. En el segundo atentado, en Alejandría, también estaba presente el patriarca copto Teodoro II. Es la segunda vez que toman como blanco al papa, luego del atentado de diciembre. Es un mensaje para dar a entender que están “cerca”, y que incluso pueden atacar alto”.
En estas horas, el gobierno ha declarado el estado de emergencia; una medida que regirá por los próximos tres meses, tal como ha explicado el presidente Abdul Fattah al-Sisi, dando luz verde para concretar arrestos y allanamientos sin mediar orden judicial. “La respuesta de las autoridades resulta tardía –comenta el vocero de la Iglesia egipcia- pero este es un problema que une a todos los gobiernos, cuando se encuentra teniendo que reaccionar ante un atentado. Cuando sucede, ya es demasiado tarde para remediarlo”.
Las autoridades han destinado otros guardias –que abarcan soldados y policías- para presidir los ingresos de las iglesias. La seguridad interna de las diferentes iglesias y comunidades cristianas también se encuentra en un nivel de alerta máximo. “Todos tratan de hacer lo mejor de sí –resalta el padre Rafic- pero para impedir hechos como este es necesario que el trabajo de inteligencia sea más fuerte”. El problema, prosigue el sacerdote, es que “no se ha recabado información de manera adecuada. Los expertos no han sido capaces de recoger datos de estos grupos terroristas, sobre las células activas que están listas para atacar. Por cierto que para llevar adelante ataques de este tipo no basta con una sola persona”.
En tanto, la comunidad musulmana ha enviado reiterados mensajes de solidaridad y condolencias a los cristianos, afirmando que estos ataques no representan al islam y que la religión de Mahoma exhorta a la paz y a la concordia. “Son sinceros en estas expresiones de condolencias –afirma el vocero de la Iglesia católica egipcia- sobre todo los fieles, la gente común, que se siente cerca en el dolor y en la emoción. Hay una participación sincera. Sin embargo, si se observan las instituciones elevadas como es el caso de la universidad de al-Azhar, éstas jamás han querido afirmar de modo rotundo que Daesh es “kuffar”, infiel. Simplemente afirman que son musulmanes que no van por un camino justo”.
“Hace tiempo que pedimos que se tome una posición clara y tajante en este sentido –prosigue el sacerdote-. Se necesita afirmar que los terroristas están fuera del islam, pero esto nunca se ha hecho. En realidad, hasta ahora no se hizo nada para cambiar la mentalidad de las personas, de fundamentalistas que luego se transforman en terroristas”.
El pensamiento luego se dirige a la inminente visita del Papa Francisco a Egipto, que está programada y que “nadie quiere cancelar ni posponer”, confirma el padre Rafic. “El gobierno hará de todo para garantizar la seguridad –afirma el sacerdote- usando el viaje apostólico para mandar un mensaje fuerte a los terroristas”. Al preguntársele sobre la posibilidad de que haya ataques en el futuro, él afirma “no saber cuándo habrán de ocurrir”, si durante las celebraciones de la Pascua, durante la visita del Papa o en otro momento, lo que es seguro es que “habrá otros ataques”.
“La atmósfera es oscura, pesada –concluye- no ha sido un Domingo de Ramos como los demás. A los fieles les he dicho que vuelvan pronto a sus hogares, que no se queden en la calle. Recen por nosotros, hagan sentir vuestra solidaridad para con los cristianos de Egipto. Los terroristas pueden seguir atacando, y en cualquier parte, como ya hemos visto reiteradas veces”. (DS)