Guo Wenhui: La corrupción endémica de China. Voice of America interrumpe la entrevista

Una transmisión con entrevista del magnate fue interrumpida detrás de presiones del gobierno chino. Guo quiere revelar la corrupción en los máximos niveles de la dirigencia del Partido comunista. Beijing logra hacer emitir un mandato de arresto internacional contra él. Las acusaciones contra Wang Qishan y su familia. Wang es el jefe de la licha contra la corrupción en China, amigo de Xi Jinping.


Hong Kong (AsiaNews/Agencias)- El millonario Guo Wenhui, cazado por Interpol, está en el centro de una historia de corrupción, de espías, de acusaciones del gobierno chino. Guo, considerado un rey al centro de un imperio inmobiliario, tiene una riqueza de unos 120 millardos de yuan (unos 18 millardos de dólares). De hace dos años vive en los EEUU, quizás para escapar de las acusaciones de corrupción que en estos años se acumularon contra él.

Hace dos días él debía tener una larga entrevista con la radio Voice of America (VoA), considerada un instrumento de libertad de expresión, para nada sometida al poder chino. La entrevista, publicitada días antes, anunciaba que Guo habría revelado también casos de corrupción en los niveles más altos de la dirigencia. Pero la VoA, curiosamente interrumpió la transmisión después de una hora, si bien había dicho precedentemente que la entrevista habría durado tres horas.

Periodistas de VoA, afirman que el gobierno chino había presionado hace días para que no se transmitiese la entrevista. Bridget Serchak, directora de relaciones públicas de VoA en cambio explicó que el “corte” después de una hora estaba previsto y que la radio habría transmitido en onda en extractos el resto de la entrevista. Para la Serchak hubo un “error de comunicación”.  

Mientras tanto, el mismo día de la entrevista, el gobierno chino obtuvo de Interpol un mandato de captura internacional para Guo, acusado de corrupción. En esto quizás fue facilitado por el hecho que el jefe actual de Interpol es Meng Hongwei, vice-ministro chino de seguridad. Además, el mismo día, 19 de abril, los medios estatales han difundido una “confesión” del vice-jefe de la seguridad china, Ma Jian. En el video, Ma afirma que recibió de Guo al menos 60 millones de yuan (unos 8,7 millones de dólares estadounidenses) en cambio de “favores” como: interceptaciones telefónicas de los competidores de Guo; congelación de sus cuentas bancarias; frenar investigaciones de la policía contra Guo y su compañía; amenazar a periodistas que escribieran artículos negativos sobre él.

Durante la entrevista a VoA, Guo dijo que las acusaciones de Ma Jian eran “imprecisas”. En todo caso ellas sacan a la luz las conexiones corruptas entre políticos y hombres de negocios.

El presidente  Xi Jinping lanzó de hace diversos años una lucha contra la corrupción que arriesga desmoronar al mismo Partido comunista chino. Pero muchos. Pero muchos sospechan que esta lucha tenga fines políticos: la eliminación de sus opositores.

Guo está amenazando desde hace tiempo revelar las tramas corruptas a los más altos niveles del Politburó. Y hoy, en respuesta a la censura a VoA y al mandato de arresto de Interpol, declaró querer revelar todas las “transacciones al extranjero” de la familia de Wang Qishan. Wang es el jefe del grupo que lucha contra la corrupción, estrecho amigo de Xi Jinping.