Panamá corta relaciones con Taiwán y elige a Beijing

Fue firmado un comunicado conjunto entre los ministros de Relaciones Exteriores Wang Yi e Isabel Saint Malo. La guerra diplomática de Beijing, a golpe de favores económicos. Taiwán, única democracia en el mundo chino, es tildada de “isla rebelde”. 


 Beijing (AsiaNews/Agencias) – El Estado de Panamá decidió cortar relaciones diplomáticas con Taipéi, y establecer vínculos con Beijing. En un mensaje televisivo, el presidente panameño Juan Carlos Varela anunció la medida diplomática, que afianza las relaciones diplomáticas y comerciales con el segundo cliente más importante del canal. Wang Yi, ministro de Relaciones Exteriores chino, y su contraparte, Isabel Saint Malo, firmaron anoche un comunicado conjunto como confirmación del paso dado (v. foto).

La decisión de Panamá torna aún más difícil la posición de Taiwán, reconocida por tan sólo una veintena de Estados en el mundo, entre ellos, por el Vaticano. Taiwán es la única democracia plena del mundo chino, pero Beijing considera a la “República de China”(el nombre oficial de Taiwán) como una “provincia rebelde”,  y constriñe a todos sus socios económicos y diplomáticos a adherir al principio de “una sola China”, exigiendo que quien quiera tener relaciones diplomáticas con China, corte lazos con Taiwán.

Ya hace tiempo que Beijing lanzó una guerra diplomática contra la “isla rebelde”, empujando a diversos Estados, que reconocen a Taiwán, a abandonarla a cambio de favores económicos. El año pasado, Santo Tomé y Príncipe y Gambia optaron por reconocer a Beijing.

La lucha de Beijing contra Taipéi se volvió más intensa tras la victoria presidencial de Tsai Ing-wen, del Partito Democrático del Progreso (DPP) en el año 2016. Se sospecha que el DPP tiene miras independentistas, y la mismísima Tsai, al asumir el cargo, calló en relación al principio de “una sola China”. Lo que Beijing teme es que los chinos del continente, inspirados por Taiwán y por su fuerza económica, reclamen una mayor democracia, también, en el continente.  

Según ciertos analistas, la presencia de Beijing en América central reduce la zona de influencia de los Estados Unidos en la región.