El programa “Summer Fun Weeks” es organizado por la agencia para los refugiados palestinos, y se extenderá a lo largo de un mes. Una “ventana de esperanza” para vivir la infancia, que así y todo no logra salvarse de los efectos de la crisis energética.
Gaza (AsiaNews) – El programa “Summer Fun Weeks” (SFW) es una “ventana de esperanza” para 190.000 niños de Gaza. Organizado por la agencia de la ONU que se ocupa de los refugiados palestinos, UNRWA, es un intento de crear un ambiente “pacífico y seguro” y “de alegría, felicidad y diversión”. Que aún debe vérselas con la crisis energética que desde el mes de abril viene sumiendo a Gaza en la oscuridad.
El SFW, que comenzó el 8 de julio pasado y se extenderá hasta el 5 de agosto, involucra a 115 escuelas y 125 lugares. En el curso de estas semanas están previstas actividades deportivas, fútbol para los varones y básquet para las niñas, actividades artísticas que incluyen la realización de grafitis y artesanías, además de castillo inflables y trampolines para los más pequeños.
Al ser entrevistada por AsiaNews, Najwa Sheikh-Ahmad, funcionario responsable de la información pública de la agencia, define la iniciativa como un modo a través del cual el UNRWA “puede contribuir positivamente a la salud física y mental, dando a chicos y chicas iguales oportunidades a la hora de participar en actividades de entretenimiento, de apoyo, que alivien las dificultades que atraviesan los niños de Gaza”.
Durante la preparación, fueron consultados los progenitores, a quienes se invitó a participar a la hora de “seleccionar a los animadores, a los equipos que trabajan en los diversos puntos”.
En lo que respecta a los niños minusválidos, la agencia ha involucrado, en uno de los turnos, a un centro de rehabilitación propio para discapacitados visuales. Además de éste, hay otros siete centros de rehabilitación que están participando para “dar a estos niños la posibilidad de jugar” y de “mejorar sus capacidades”.
Sin embargo, el SFW no puede huir de la presión de la crisis energética en curso, sobre todo en lo que se refiere a costos. “El corte del suministro eléctrico pesa sobre las actividades del SFW”, cuenta Najwa. “Aumentan los costos, puesto que necesitamos contar con los equipos generadores de las escuelas de UNRWA para compensar la falta o los cortes de energía, y así hacer funcionar los juegos inflables. Esto significa más combustible”. Además, “si los generadores se dañan, la reparación implica que habrá juegos sin funcionar durante un tiempo, sobre todo los inflables, que dependen de estos equipos. Si el generador roto requiere de un cambio de repuesto, esto quiere decir que los estudiantes pasarán su turno sin poder utilizar los principales juegos”.
Desde abril pasado que Gaza atraviesa una crisis energética, la cual ha empeorado a raíz de la rivalidad entre el partido que conduce la Autoridad Nacional Palestina y las autoridades de la Franja, Hamas.