Según el premier israelí, la emisora “incita a la violencia” con su cobertura de las tensiones en Jerusalén. Un reportero registró a un soldado israelí propinándole patadas a un palestino.
Jerusalén (AsiaNews/Agencias) – “Trabajaré para que se implemente la legislación necesaria a fin de expulsar a al-Jazeera de Israel”. Con estas palabras, ayer, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu anunció su intención de cerrar las oficinas del canal televisivo en Jerusalén.
En su perfil de Facebook, Netanyahu acusa a al-Jazeera de “incitar a la violencia en el Monte del Templo” (para los palestinos, la “Explanada de las Mezquitas”).
Al-Jazeera es uno de los numerosos servicios de información internacionales que han cubierto las crecientes tensiones que se viven en la ciudad, iniciadas el 14 de julio pasado, cuando tres árabes israelíes abrieron fuego contra la policía israelí en la Explanada, matando a dos oficiales drusos. Desde entonces, Israel ha dispuesto medidas de seguridad que han desencadenado las protestas de los palestinos, quienes se niegan a ingresar a la Explanada, optando por rezar en las calles adyacentes, y exigen que se restablezca la situación a tal como era antes del ataque.
La red, que tiene su base en Doha, publicó un video de los enfrentamientos entre la policía y los manifestantes palestinos luego de la oración del viernes 21 de julio: en la filmación se ve a un soldado israelí propinarle patadas a un palestino que se encuentra arrodillado sobre algo que parece ser una alfombra para la oración islámica. El video también fue difundido por el portal del diario israelí Haaretz. Según el reportero de al-Jazeera, los oficiales israelíes habían atacado a los palestinos cuando ellos se estaban manifestando de modo no violento, en las inmediaciones de la Explanada.