En julio de 2018 tendrán lugar las próximas elecciones legislativas. En las elecciones comunales del pasado mes de junio la oposición ganó terreno. Ahora, ambos líderes del Cambodge National Rescue Party (CNRP) han quedado fuera de juego. Premier: “Siempre está la misma mano detrás de esto, la de América”.
Phnom Penh (AsiaNews/Agencias) – Un tribunal camboyano acusa al líder de la oposición Kem Sokha de “traición y espionaje”, por un presunto complot.
El tribunal de Phnom Penh declara que el imputado irá a juicio en vista de un “plan secreto y una conspiración llevada adelante con ciudadanos extranjeros cuya identidad es desconocida”, anunciando que el delito que se le imputa puede ser castigado con una pena máxima de 30 años de prisión.
Kem Sokha, de 64 años de edad, guía el principal partido de la oposición, el Cambodge National Rescue Party (CNRP). Sam Rainsy, el otro líder del movimiento, está exiliado en Francia por haber eludido una orden de arresto en 2010, por lo cual fue condenado por contumacia.
Las autoridades arrestaron a Kem Sokha el 3 de agosto pasado, cuando el gobierno del primer ministro Hun Sen denunció una “conspiración secreta”. “Detrás de Kem Sokha, siempre está la misma mano, la de América”, afirmó, refiriéndose a un complot para “destruir el país”.
Según los analistas, Hun Sen, quien está en el gobierno desde que se produjo la caída de los Jemeres rojos, está decidido a resistir y a prolongar su gobierno, que ya lleva treinta años, teniendo varias motivaciones para desarticular todos los grupos de oposición. El arresto sorpresivo de Kem Sokha aumenta aún más las tensiones políticas que rigen en Camboya. Las elecciones legislativas de julio de 2018 son un test importante para el gobierno, que se aboca a apretar las clavijas contra los opositores y activistas que defienden los derechos humanos. En las elecciones comunales desarrolladas en el pasado mes de junio, el CNRP dio un notable salto adelante en el número de preferencias.