Jerusalén, líderes cristianos acusan a Israel de “debilitar la presencia cristiana’

Declaración conjunta de los jefes de las Iglesia de la ciudad santa. Se critica la sentencia dictada en el caso de la “Puerta de Jaffa”. La comunidad cristiana “dinámica y vivaz” es un elemento esencial de la sociedad. Llamado “a las Iglesias cristianas en todo el mundo, a los Jefes de Gobierno ya todas las personas de buena voluntad”. 


Jerusalén (AsiaNews) – “En estas acciones, vemos un intento sistemático de socavar la integridad de la Ciudad Santa de Jerusalén y de Tierra Santa, y por debilitar la presencia cristiana”. De esta manera, los líderes de las Iglesia de Jerusalén acusan a Israel de violar el Status quo, que establece las modalidades de acceso y oración en los lugares de culto de Tierra Santa.

La declaración publicada ayer se refiere a la sentencia dictada en el caso de la “Puerta de Jaffa”, que confirma la cesión de tres edificios de la Iglesia ortodoxa a un grupo de colonos judíos, y un proyecto de ley “motivado políticamente, el cual limitaría los derechos de las Iglesias sobre sus propiedades”. Aunque no se especifica la misma en el comunicado, lo más probable es que la ley citada sea aquella que prevé la nacionalización de los bienes de las Iglesias que han sido vendidos a empresas particulares, proyecto que ha sido presentado por el partido Kunalu y que fue aprobado por 39 miembros de la Knesset.  

Para los líderes de las Iglesias, estas acciones apuntan a debilitar la presencia cristiana en Tierra Santa: “Afirmamos, del modo más claro posible, que una comunidad dinámica y vivaz es un elemento esencial en la composición de nuestra sociedad, tan diversificada, y las amenazas a la comunidad cristiana no pueden sino agudizar las tensiones inquietantes que han surgido en estos momentos difíciles”. “Semejantes intentos de perturbar a la comunidad cristiana de Jerusalén y de Tierra Santa no atañen sólo a una Iglesia; nos golpean a todos nosotros, y golpean a los cristianos y a todas las personas de buena voluntad de todo el mundo”, continúa el comunicado. “Siempre hemos sido fieles a nuestra misión de garantizar que Jerusalén y los Lugares Santos estén abiertos a todos, sin hacer distinciones ni discriminaciones”.

Los jefes de las Iglesias luego se dirigen “a los líderes y a los fieles de las Iglesias cristianas en todo el mundo, a los Jefes de Gobierno y a todas las personas de buena voluntad… No podemos subrayar lo suficiente la tamaña gravedad de las consecuencias que devienen del actual y sistemático ataque al Status quo en lo que respecta a la integridad de Jerusalén y al bienestar de las comunidades cristianas de Tierra Santa, así como a la estabilidad de nuestra sociedad”.

Desde hace años, grupos de judíos israelíes tratan de adueñarse de espacios en Jerusalén y sus alrededores, ejerciendo presiones económicas y políticas sobre los residentes árabes cristianos y musulmanes, ya sea adquiriendo terrenos o bien expropiándolos.