DeclaraciĆ³n de Balfour, un centenario de protestas y celebraciones

En 1917 el secretario de Exteriores prometió un “Hogar  hebreo” en el respeto de los derechos de las comunidades no-hebreos. La visita de Netanyahu en Londres. Abbas: una “catástrofe”, reconocer a Palestina para compensar los sufrimientos. Netanyahu: la única tragedia es el rechazo en aceptarla.


Jerusalén (AsiaNews/Agenzie) – A cien años de la promesa de Lord Balfour para un “Hogar hebreo”, que allanó el camino para la creación del Estado de Israel, la Premier inglés Theresa May recibió en Londres a su contraparte israelí, Benjamín Netanyahu, para la celebración del Centenario. Como cada año, la conmemoración del evento es matriz de tensiones, entre los festejos israelíes y las protestas de los palestinos que consideran la “Declaración de Balfour” una injusticia histórica.

El 2 de noviembre de 1917, el entonces secretario de Exteriores, Arthur Balfour  firmaba una carta en la cual se aseguraba al líder de la comunidad hebrea británica, lord Walter Rothschild, el apoyo del reino a la creación de una “nación hebrea” en Palestina. El apoyo del gobierno inglés a los pedidos del movimiento sionista no debían perjudicar “los derechos civiles y religiosos de la existentes comunidades no-hebreas”.

El Centenario de la promesa provoca sentimientos contrapuestos en Israel y Palestina. Los palestinos y sus partidarios organizan cada año protestas y manifestaciones. Hoy, un millar de manifestantes se reunieron en Gaza, Ramallah, Belén y Nablús y en las ciudades cisjordanas. En Belén un grupo marchó desde la frontera sur hasta el norte de la ciudad, llegando hasta el muro de separación. Aquí han colocado un maniquí, con  las características de Balfour, al cual golpeaban y les tiraban zapatos, para luego quemar una copia dela declaración. La protesta fue rápidamente suspendida por los israelíes con gases lacrimógenos y proyectiles de goma.

La conmemoración en Londres culminará esta noche con una cena organizada por los herederos protagonistas del evento, los descendientes de Balfour y Rostschild. La semana próxima el Parlamento israelí realizará una sesión conmemorativa especial.

En un intento de balance diplomático, el ministro inglés de Exteriores, Boris Jhonson, sostuvo que la Declaración de Balfour no está realizada en su totalidad. La referencia es sobre la cláusula que se relaciona con los derechos de las comunidades no- hebreas, en general ignorada en las conmemoraciones de las autoridades hebreas.

La carta de Balfour se hizo pública en 1920, mientras el Reino Unido obtenía el mandato administrativo en Oriente Medio de Palestina e Irak. En un contexto todavía colonial, Gran Bretaña prometió la creación de un Estado hebreo para asegurarse un aliado en Oriente Medio y salvaguardar sus propios intereses económicos y comerciales en el Canal de Suez. La declaración es controvertida porque en el momento de su firma la comunidad henrea en Palestina representaba menos del 10% de la población. Como el escritor hebreo y húngaro. Arthur Koestler afirmó en ese tiempo. “Una nación promete solemnemente a una segunda nación el país de una tercera”. A esto, se agrega que la promesa de Balfour contradecía la hecha a los árabes en 1915 de un Estado independiente como recompensa por su contribución a la derrota de los Otomanos durante el primer conflicto mundial.

Hoy, el presidente de la Autoridad nacional palestina Mahmoud Abbas, pidió en un comunicado a Gran Bretaña reconocer a Palestina como Estado. Esto como compensación de los sufrimientos soportados por los palestinos a causa de la carta, una “catástrofe” que dio el inicio a aquel pro9ceso que tuvo como consecuencia el nacimiento de Israel y la expulsión de 750 mil árabes. Por su parte, Benjamín Netanyahu comenta que la verdadera tragedia no es la Declaración, sino el “rechazo (de los palestinos) a aceptarla después de 100 años”.