Esperaban al Papa miles de birmanos, pero también tailandeses, vietnamitas, camboyanos, filipinos y australianos. Imponentes las medidas de seguridad adoptadas por las fuerzas armadas.
Rangún (AsiaNews)- En los momentos de la llegada del Papa al aeropuerto internacional, las calles de Rangún estaban colmadas por los peregrinos que esperaban ansiosos la llegada del Papa a la ciudad.
El tráfico es más caótico de lo normal y en las arterias principales se camina a paso de hombre. Si bien para hoy no esté previsto ningún encuentro público del pontífice, los fieles llegados de todas partes de Myanmar, quieren dar igualmente un caluroso saludo de bienvenida al Papa. Casi un tercio de los católicos birmanos llegaron a Rangún, también numerosos los tailandeses, vietnamitas, camboyanos, filipinos y australianos.
Son 6 los lugares donde los peregrinos pueden encontrarse para saludar el pasar del Papa Francisco. Grupos de fieles, todos llevando una camiseta celebrativa del viaje apostólico, se colocaron a lo largo de toda la Pyay road (foto), ya 3 horas antes que el avión que traía al Papa aterrizase, sin importarles el calor sofocante. Hay un clima de fiesta y los católicos hacen flamear las banderas de Myanmar y del Vaticano, mientras que vestidos con sus trajes tradicionales nos dicen sobre las tantas etnias que componen el pueblo birmano.
Mientras tanto, las medidas de seguridad adoptadas por las fuerzas armadas, son imponentes. Unidades de la policía se apostaron ya desde ayer a lo largo de todo el recorrido que el cortejo papal recorrerá, desde el aeropuerto hasta la residencia arzobispal y en los alrededores de los edificios de las iglesias. En los lugares frecuentados por los periodistas internacionales es evidente la presencia de la policía especial, muchos de ellos vestidos de civil que estaban presentes ayer por la mañana también en la conferencia de prensa de presentación de la visita papal, en el media center preparado en el Shangri-La Hotel. En los días pasados circularon voces de posibles manifestaciones de los musulmanes de Rakhine aprovechando la llegada del Papa para hacer sentir su voz. Sin embargo, se cree que son voces inventadas por las autoridades para justificar tanta presencia masiva de policía y ejército en el territorio y así crear falsos alarmismo. Se anuncian estrictos controles en ocasión de la misa en el Kyaikkasan Ground, que no ahorrarán ni siquiera a los voluntarios coordinados por la Conferencia episcopal (Cbcm). Fuentes de (AsiaNews)- refieren que las autoridades tratan de limitar el número, tratando de crear un clima moderado de tensión.