Desastre Formosa, activista vietnamita condenado a siete años por haber difundido la protesta

Nguyen Van Hoa deberá descontar también 3 años bajo arresto domiciliario. Los jueces lo han reconocido culpable de propaganda contra el Estado. Él fue procesado a puertas cerradas y sin el beneficio de un abogado en el aula. ONGs internacionales contra Hanói: pena “desproporcionada” en relación a los hechos. En las cárceles del país hay decenas de prisioneros por delitos de conciencia.


Hanói (Asianews/Rfa)- Un tribunal vietnamita condenó ayer a 7 años de cárcel al bloguero y activista Nguyen Van Hoa, con la acusación de “haber conducido una campaña de propaganda contra el Estado”. Su culpa es “haber fomentado la protesta” contra el gobierno por la gestión del incidente en la fábrica de acero taiwanesa Formosa Plastic Group responsable, en abril de 2016, de verter compuestos químicos tóxicos a las aguas del puerto de la provincia de Ha Tinh.

La pérdida de abril del año pasado mató unas 115 toneladas de peces y dejó sin trabajo a las industrias de la pesca y el turismo de 4 provincias centrales. La compañía prometió una indemnización de 500 millones de dólares estadounidenses para resolver la cuestión y resarcir a las personas afectadas por las pérdidas; sin embargo el gobierno reprimió con fuerza las protestas callejeras por el monto de la compensación y la lentitud en la modalidad del pago.

Uno de los que guiaba la revuelta era el joven de 22 años, Nguyen Van Hoa, que fue arrestado por la policía el 11 de enero pasado junto a muchos otros activistas antes del inicio del Tet (fiesta del año nuevo), si bien la noticia sobre su detención fue comunicada recién el 3 de febrero. El Tribunal del pueblo de la provincia de Ha Tinh lo halló culpable de haber violado el Art. 88 del Código penal, en el contexto de un proceso que duró 2 horas y media. Una vez que salga de prisión, él deberá descontar tres años bajo arresto domiciliario, como pena adicional.

En el momento del debate en el aula, el joven activista y ambientalista no pudo beneficiarse siquiera con la presencia de un abogado. Y los intentos de ponerse en contacto con los familiares para hacer al menos un comentario sobre la sentencia resultaron vanos.

Según lo que refieren los medios del Estado, Hoa habría difundido un video, fotos y entrevistas relacionadas con el incidente que involucró a Formosa Plastic Group, con el objetivo de “hacer propaganda” y “difamar al gobierno”. Él, agregan los periódicos de Hanói, habría “recibido dinero” de parte de “extremistas y fuerzas hostiles” para fomentar los desórdenes públicos.   

Todas acusaciones que las personas cercana a él  rechazan con indignación.

Le Cong Dinh, abogado por los derechos humanos, definió el procedimiento contra Hoa como “un juicio premeditado” que era “ampliamente previsible” desde hace tiempo. Por lo tanto se deduce que él fue condenado en un “proceso secreto”, afirmando que los jueces se “burlaron del pueblo” porque adelantaron un día (el 26 de noviembre) un proceso que en realidad estaba previsto para el día siguiente, el 27 de noviembre. “En base a las leyes vietnamitas -concluyó el letrado- el imputado tiene derecho a rechazar el abogado de oficio impuesto por el tribunal".

La sentencia contra el ambientalista vietnamita provocó la protesta de numerosas asociaciones internacionales pro derechos humanos, entre las cuales figuran Reporteros sin fronteras (Rsf). El responsable para la región Asia-Pacífico, Daniel Bastard, define la pena como “totalmente desproporcionada” en relación a los hechos.

Según lo que refiere Ammesty International (AI) todavía hoy en las cárceles de Vietnam hay cuando menos 84 detenidos por delitos de conciencia, el número más alto entre todos los países del sudeste asiático. En el informe 2017 de World Press Freedom Index, Rsf colocó a Hanói en el 175to  puesto sobre 180 naciones en el mundo, en relación a la libertad de prensa.