El viaje del Papa Francisco, inmerso en la historia del Bangladesh y de sus cristianos
de Sumon Corraya

La visita al monumento dedicado a los mártires de la Guerra de liberación contra el Pakistán occidental en 1971: muchos de ellos fueron cristianos, sostenidos por monjas y sacerdotes. El museo dedicado al fundador del país, el jeque Mujibur Rahman, a quien el Papa rendirá un homenaje. La visita a la nunciatura apostólica y luego al complejo donde se encuentra la iglesia del Holy Rosary, una de las más antiguas del país.


Dacca (AsiaNews) – No sólo la visita en sí, sino que también los lugares que el Papa Francisco visitará en Bangladesh tienen un fuerte valor histórico. Hoy, el Pontífice se dirigirá al Monumento nacional dedicado a los mártires (foto 1), ubicado en Savar, a 35 km al noroeste de la capital. Aquí  rendirá un homenaje a los mártires que sacrificaron su vida durante la guerra de liberación de Bangladesh, en 1971, cuando el país se independizó de Pakistán.

El conflicto se inició cuando la Junta militar pakistaní “occidental” lanzó la “Searchlight operation” contra el pueblo del Pakistán “oriental”, la noche del 25 de marzo de 1971. Las fuerzas armadas emprendieron la eliminación sistemática de los bengalíes nacionalistas, actuando contra la población civil, estudiantes, intelectuales, minorías religiosas y fuerzas armadas. Además, ellos anularon el resultado de las elecciones de 1970, arrestado a quien entonces se desempeñaba como primer ministro, Sheikh Mujibur Rahman. La guerra llegó a su fin el 16 de diciembre de 1971, cuando el Pakistán occidental se rindió. Las fuerzas armadas indias y soviéticas prestaron su apoyo al Bangladesh, y 1.661 soldados indios perdieron la vida en el conflicto.   El Pakistán occidental, en cambio, contaba con el apoyo de China, Estados Unidos, el Reino Unido, Indonesia y Arabia Saudita. Muchos combatientes que defendían la libertad de los cristianos fueron asesinados en los enfrentamientos, y varios sacerdotes y monjas los ayudaron a obtener una bandera distinta.  

Tras rendir un homenaje a los mártires, el pontífice se dirigirá al museo de la memoria “Bangubandhu” para firmar el libro de honor. El museo está situado en el mismo lugar donde estuvo la residencia del fundador y presidente del Bangladesh, Sheikh Mujibur Rahman. Él fue asesinado junto a la mayor parte de su familia justamente en ese palacio, que actualmente funciona como un museo. En bengalí “Bangubandhu” significa “amigo”. Rahman fue el primer presidente del país, y luego ocupó el cargo de premier, desde marzo de 1971 hasta su muerte, en agosto de 1975. Gracias a su sacrificio y a su capacidad de liderazgo, la guerra de liberación del Bangladesh condujo a la creación de un nuevo país, separado del Pakistán occidental. Su hija, Sheikh Hasina, es la actual líder de la Liga awami, y se desempeña como primera ministra de Bangladesh. El pontífice visitará el museo, para rendir un homenaje a Rahman.

En la misma jornada, por la tarde, hará una visita de cortesía a la residencia del presidente, cuyo edificio cubre esta función desde la independencia, y ahora es escenario de importantes encuentros y seminarios. Más tarde, el pontífice se encontrará con la sociedad civil y el personal diplomático.

El primero de diciembre, el Papa Francisco celebrará la misa en el parque Suhrawardy Udyan (foto 2), en el centro de Dacca, y ordenará a 16 diáconos. Aquí, el 16 de diciembre de 1971, el Teniente General pakistaní A. A. K. Niazi se rindió, tras ser derrotado por la armada india, conducida por Jagjit Singh Aurora. La fecha en que se firmó la rendición es celebrada en Bangladesh como el Día de la Victoria. Aquél día, el jeque Mujibur Rahman pronunció el histórico discurso “Esta vez, la batalla es por nuestra libertad”, con el cual alentó a los bangladesíes a prepararse para combatir por la liberación.

Después, el Papa se dirigirá a la nunciatura apostólica para recibir la visita de la primera ministra  Sheikh Hasina. Ella está trabajando contra los extremistas, y bajo su guía el país ha tenido un repunte en el crecimiento. La nunciatura apostólica se encuentra en el barrio diplomático de Barihdara, y es aquí donde el Papa se alojará durante los tres días de su visita. Desde 1972, el Vaticano mantiene firmes relaciones diplomáticas con Bangladesh. El Card. Patrick D’Rozario, arzobispo de Dacca, comenta que esta relación “única” será celebrada con alegría en esta visita. Una relación fundada “sobre valores humanos y espirituales”, en particular “el amor por la humanidad, por la vida humana, por lo derechos humanos”, pero también por los pobres, las mujeres y los niños; la caridad, la salud y la educación; el ambiente y el diálogo inter-religioso.

El mismo día, el pontífice hará una visita al Hogar de sacerdotes ancianos, que se encuentra en la casa del arzobispo, en el barrio Ramna, de Dacca. En los jardines se llevará a cabo un encuentro inter-religioso por la paz. En el mismo complejo funciona la oficina del arzobispo y la catedral de St. Mary.  

El 2 de diciembre, último día del viaje, el Papa tendrá un encuentro privado en la casa de la Madre Teresa de Tejgaon, ubicada dentro del complejo de la iglesia del Holy Rosary (foto 3). Allí se reunirá con sacerdotes, religiosos y mujeres y hombres consagrados; luego hará una visita al cementerio de la iglesia. El complejo fue fundado por misioneros portugueses agustinos en el año 1677. Es una de las iglesias más antiguas del país al cual se dirigieron los misioneros portugueses para sembrar la fe cristiana.  

La última cita programada que realizará el Papa Francisco tendrá lugar en el Notre Dame College (foto 4) de la capital. El instituto católico es uno de los mejores del país, y muchos legisladores, abogados, educadores y periodistas se han formado allí, aún cuando el 90% de ellos profesa otra religión. Actualmente, muchos de ellos desempeñan importantes roles en la conducción de Bangladesh.