Miles protestan para ‘proteger a Hong Kong’ de las interferencias de Beijing

En el centro de las críticas está la decisión de China de gestionar el control de los viajeros en la estación de trenes de alta velocidad de West Kowloon. El final del principio: “una nación, dos sistemas”.


Hong Kong (AsiaNews/Agencias)- Miles de personas, sobre todos jóvenes, salieron a las calles para protestar contra las interferencias de Beijing sobre la vida en el territorio, que degrada la autonomía prometida cuando finalizó el mandato británico.

Llevando carteles con leyendas del tipo: “¡Protege a Hong Kong!”, los manifestantes fueron al centro, cerca de la Civic Square, que recientemente fue reabierta al público luego de las manifestaciones de 2014 a favor del sufragio universal. Entre los manifestantes, estaba Joshua Wong, el joven líder del movimiento Occupy Central.

La semana pasada, la Asamblea nacional del pueblo, el parlamento de Beijing, decidió extender la autoridad de China sobre una parte de la estación de trenes de alta velocidad que unirá Hong Kong con el resto de China. En la práctica, la policía y aduaneros chinos serán los responsables del control de todos los viajeros,  en ambas direcciones.

China tomó tal precaución aduciendo que dicha regla sólo resulta válida para un área específica de la estación en West Kowloon y que no rige sobre toda la ciudad, pero para gran parte de la población esto significa reducir la autonomía del territorio, que según la Basic Law -la Constitución de Hong Kong firmada por Beijing y Londres -debiera ser garantizada siguiendo el principio “una nación, dos sistemas”. La decisión de la ANP fue criticada por la asociación de los abogados de Hong Kong, que califican la medida como el paso más retrógado  en la aplicación de la Basic Law de 1997, el año en el cual Hong Kong volvió a estar bajo el dominio chino.

Las interferencias de Beijing sobre Hong Kong son muy pesadas: van desde los intentos de incorporar a la currícula escolar horas de historia sobre los grandes logros de la madre patria, con finalidades propagandistas, a la reducción de la libertad de educación en las escuelas, incluso en la privadas; el bloqueo de los pasos hacia el sufragio universal en las elecciones; la exclusión de los parlamentarios democráticos;  el rapto y arresto de editores críticos contra la dirigencia china.

Uno de los manifestantes, de nombre Wong, entrevistado por la RFA, puntualiza: “No estamos todavía ni siquiera a mitad del camino de los 50 años, plazo en el cual se decía que nada iba a cambiar en Hong Kong, y vemos, en cambio, que todo fue cambiado y que se ha vuelto “una nación, un sistema”.