Bangkok, condenaron a cadena perpetua a ‘Mr. X’, el señor laosiano de la droga

Era el jefe de una red de contrabando que producía droga en el “Triángulo de oro”, del cual forman parte Tailandia, Laos y Myanmar. La ruta laosiana hacia el sur siempre es la más utilizada por los traficantes que tratan de llegar a Tailandia, Malasia e incluso a Australia y Japón, donde las ganancias se incrementan.


Bangkok (AsiaNews/Agencias) – Un tribunal de Bangkok condenó a cadena perpetua a un importante señor de la droga laosiano, conocido con el apodo de “Mr. X”, mientras las autoridades tailandesas tratan de debelar el floreciente tráfico de metanfetamina a través de las fronteras nacionales. En enero del año pasado, en el aeropuerto de la capital, las Fuerzas de seguridad de Bangkok capturaron a Xaysana Keopimpha (foto), un temerario de 43 años de edad, que antes de su arresto, se valía de los medios para hacer alarde de sus lazos con las celebridades y ostentar su pasión por los autos deportivos.   

Él ha sido acusado de ser el jefe de una organización internacional dedicada al contrabando de toneladas de pastillas producidas en Myanmar, que eran transportadas a través de Laos e introducidas ilegalmente en Tailandia y Malasia. Éstos son dos mercados líderes para los famosos comprimidos de metanfetaminas, más conocidos como “yaba” (remedio loco), que se venden a unos 10 dólares estadounidenses por unidad. La ruta laosiana hacia el sur es siempre la más utilizada por las bandas de narcotraficantes que tratan de llegar a Tailandia, Malasia e incluso a Australia y a Japón, donde el costo de la droga puede incrementarse mucho.

En un principio, el tribunal de Bangkok había condenado a Xaysana a la pena de muerte, pero luego de que el imputado se declarara culpable de varios delitos vinculados al tráfico de estupefacientes, se redujo la sentencia a cadena perpetua. Xaysana era jefe de una red de contrabando que producía droga en el “Triángulo de oro” –una región fronteriza donde se encuentran Tailandia, Laos y Myanmar- y utilizaba el cruce de frontera de Nong Khai, entre Tailandia y Laos, para transportar la droga hacia el sur.