Riad: misterio sobre la suerte de Mohammad bin Salman, desaparecido desde abril

Fuentes no confirmadas refieren de un intento de golpe la noche del 21 de abril. Mbs habría resultado herido, según algunos, habría muerto. La única certeza es su ausencia en eventos oficiales, entre los cuales la visita de Pompeo. Un príncipe saudita exilado invoca la revuelta contra la dirigencia de Riad. Lobby sauditas detrás de la cancelación del acuerdo nuclear de Trump.        


Riad (AsiaNews)- Medios occidentales y redes sociales están relanzando en estos días voces contrastantes sobre la suerte de Mohammad bin Salman (Mbs), de 32 años, príncipe heredero saudita que no parece en público desde abril pasado. Según algunas fuentes el potente número dos del reino, inspirador del programa de reformas económicas y sociales Vision2030, primer sostenedor de la guerra en Yemen y de la campaña anticorrupción (contra los posibles rivales) habría resultado herido en el contexto de un intento de golpe de Estado. Algunos hacen hipótesis hasta de su muerte.

Los medios sauditas han desmentido decididamente las noticias sobre disparos alrededor del palacio real el mes pasado y de (presuntos) golpes de Estado. La versión de las autoridades de Riad habla de un dron que se acercó demasiado a los muros del palacio y las guardias habrían disparado algunos tiros para alejarlo. Además, las voces oficiales de la propaganda real han difundido una foto-sin precisar la fecha-en la cual se ve al príncipe heredero participando en una reunión de gobierno.

Las defensas oficiosas no disipan las dudas alrededor de una figura que ha hecho propio de su presencia en público uno de los puntos de fuerza. Por esto pesa como una gran piedra su ausencia durante la visita oficial del neo-secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo a Arabia saudita a fines de abril. La última aparición segura es del 12 del mes pasado durante un encuentro real de España.

La cuenta de twitter al-Ahd al-Jadeed, bien informada sobre las cuestiones de la casa wahabita y con fuentes autorizadas en el palacio, refiere que Mbs no se ve dentro de las relaciones estrechas del círculo real desde el 21 de abril, día del (presunto) incidente. Durante las fases excitadas del ataque, él habría sido transferido a un búnker cerca de una base militar (bajo el comando de los EEUU). La semana pasada el cotidiano iraní Kayhan, relanzando fuentes de inteligencia de un país árabe, dijo que el príncipe heredero fue alcanzado por 2 proyectiles y habría muerto por las heridas recibidas.

Fuentes oficiales en Riad refieren que para desmentir las confusiones creadas sobre su suerte, Mbs estaría planificando una campaña oficial en público en los próximos días. Mientras tanto, en el exterior, se multiplican las voces que pide “un cambio de régimen” en el reino saudita. La última es la del príncipe exilado Khalid bin Farhan, que invita a dos parientes estrechos (los príncipes Ahmed bin Abdulaziz y Muqrin bin Abdulaziz) a realizar un golpe contra el rey Salman y el hijo. Él está en exilio en Alemania desde 2013, y afirma que el 99% de los miembros de la familia real, de los servicio de seguridad y del ejército está de acuerdo en apoyar un golpe de Estado”.

Mientras tanto surgen con insistencia voces de un apoyo saudita a la decisión del presidente de EEUU, Donald Trump de cancelar el acuerdo sobre lo nuclear iraní y reintroducir nuevas sanciones contra Teherán. No sólo Israel, por lo tanto, sino también Riad ejercitó su propia influencia sobre Washington para hacer fracasar un pacto apoyado a gran voz por la comunidad internacional. Entre las voces activas de la “propaganda” anti iraní en los Estados Unidos está el MSLGroup, que destinó millones de dólares en material de prensa y documentos contra el acuerdo.