Es todavía incierto el destino de un equipo de fútbol de 12 niños y de su entrenador. Las fuertes lluvias frenan las operaciones de socorro. El nivel de las aguas casi alcanzó el ingreso a las grutas, que son largas unos 10 Km. Las autoridades trajeron helicópteros, agentes y perros rastreadores para encontrar otras aberturas. La nación está rezando por ellos
Chiang Rai (AsiaNews/Agencias) – Escuadras de socorro y buzos británicos colaborarán en la búsqueda del equipo de fútbol que quedó atrapado en las grutas de Tham Luang, en el distrito septentrional de Mae Sai. Frenadas por las incesantes lluvias que se abatieron sobre la provincia de Chiang Rai por toda la noche, las operaciones de socorro llegaron al sexto día. Mientras la nación está con la respiración contenida, los socorredores no han alcanzado todavía a ninguno de los 12 niños, todos en una edad comprendida entre los 1 y los 16 años ni a su entrenador de 25 años.
Las cavidades subterráneas se extienden por 10 km en el parque de Tham Luang Khun Nam Nang Non y se articulan en 4 cámaras. Esta mañana, el nivel de las aguas casi alcanzó el ingreso principal del complejo. Los socorredores han debido remover o sacar sus instrumentos de la gruta y esperar algunas horas, esperando que las precipitaciones disminuyeran.
Fuera de las cavernas, la policía colocó a 132 agentes asistidos por perros rastreadores, en el intento de encontrar otras aberturas. Mientras tanto los helicópteros sobrevuelan el parque. El vice Premier, Prawit Wongsuwon anunció la llegada de 30 especialistas estadounidenses de Hawaii. Ellos tratarán escavar algunos túneles para llegar hasta los dispersos niños.
En estas horas de angustia, el país está recogido en oración. Phra Ratchapariyat, jefe de los monjes budistas de Phayao, realizó una ceremonia religiosa con los representantes del clero de toda la provincia en el distrito de Wat Sri Khom Kham (distrito de Muang). Phra Khru Saengla Thammasiri, abad de Wat Phra That Sai Muang, llegó a Tham Luang desde la ciudad de Thachilek (Myanmar), para ofrecer un apoyo espiritual a los familiares de los niños perdidos. Hace dos días, ellos han organizado una vigilia de oración, durante la cual han encendido velas y antorchas, para que la luz guíe a sus queridos hacia afuera de las grutas.