Terminó el encuentro de los Jóvenes católicos en Pontianak, una ‘celebración de fe’ (Foto)
de Mathias Hariyadi

Una misa solemne en la catedral de San José cerró el encuentro de 4 días organizado por la Pontificia sociedad de los jóvenes misioneros. Participaron uno 1.300 jóvenes, provenientes de 35 diócesis del país, de Timor del Este y de Malasia. Todos han hicieron un juramento para reafirmar el compromiso de la comunidad católica en salvaguardia de la unidad de Indonesia como sociedad pluralista.


Pontianak (AsiaNews) – Los cotidianos momentos de oración y las funciones religiosas que entre el 3 y el 6 de julio han marcado los días del encuentro nacional de los jóvenes católicos en Pontianak (Kalimantan Oeste) fueron “una verdadera celebración de la fe”. Es así que los más de 1.300 jóvenes participantes han vivido el “jamboree” organizado por la Serikat Kepausan Anak dan Remaja Misioner (Sekami – Pontificia sociedad de los jóvenes misioneros).

El evento se concluyó con una misa solemne en la catedral de san José. Quienes celebraron fueron Mons. Agustinus Agus y Mons. Hieronymus Herculanus Bumbun, arzobispo emérito de la diócesis anfitriona; Mons. Aloysius Sudarso, arzobispo de Palembang  (Sumatera del Sur); Mons. Giulio Mencuccini, obispo de Sanggau (Kalimantan Oeste); Mons. Antonius Franciskus Subianto Bunyamin, obispo d Bandung (Java Oste). Este último estaba también presente en calidad de secretario general de la Conferencia episcopal indonesia (KWI) y cerró en vía oficial el jamboree.

El p. Markus Nurwidi Pranoto, director de las Pontificias obras misioneras (Komisi Kepausan Indonesia - KKI) de la KWI, distribuyó los certificados de aprecio a los representantes de todas las diócesis llegados de cada parte del país: 35 en total, a las que se agregan los jóvenes ´provenientes de Timor Este y de la diócesis de Kuching (Malasia).

Todos los jóvenes han leído un juramento con el cual reafirman el compromiso de la comunidad católica en salvaguardia d la unidad de Indonesia como sociedad pluralista. Los obispos al final los han alentado a vivir según las enseñanzas de la Iglesia y hacerse mensajeros de la Buena Noticia, de la paz y de la tolerancia.