Manila, primera condena por los homicidios extrajudiciales sostenidos por Duterte

Condenados 3 policías por el asesinato de un joven de 17 años confundido con un despachador de droga. El p. Gariguez: “La sentencia es una victoria sobre la tiránica guerra a los narcóticos del gobierno”. Fueron asesinados hasta ahora 54 menores.

 


Manila (AsiaNews) – La 125° sección de la Corte regional de Caloocan City (Metro Manila) condenó a “reclusión perpetua” a 3 agentes de la policía nacional filipina (PNP) por el homicidio de Kian de los Santos (Foto 2), confundido por un despachador de droga. El hecho sucedió el 16 de agosto de 2017 durante la operación antinarcóticos “One time, Big time”, el asesinato extrajudicial del joven de 17 años había desencadenado la indignación pública: en las semanas sucesivas, las polémicas obligaron al presidente Rodrigo Duterte a poner un freno temporáneo a su controvertida guerra a la droga.

Arnel Oares, Jeremías Pereda y Jerwin Cruz (Foto 1) son los primeros condenados por un homicidio realizado durante la campaña. Un colega de ellos Renato Peres Loveras, alias “Nono”, está todavía prófugo. Los agentes descontarán una pena entre los 20 y los 40 años de cárcel, sin posibilidad de libertad condicional y deberán indemnizar a la familia de la víctima.

La sentencia es “una victoria de la Justicia sobre la tiránica guerra a la droga llevada a cabo por el gobierno actual”. Lo declara a AsiaNews el p. Edwin A. Gariguez (Foto 3), secretario ejecutivo del Secretario nacional para la acción social (NASSA) y Caritas Filipinas, brazo humanitario de la Conferencia episcopal (CBCP). “El veredicto-prosigue el sacerdote- es la clara demostración que la mano dura está victimizando a personas inocentes y que la involucración de la policía en los asesinatos extrajudiciales es una realidad”.

La Iglesia católica está entre las pocas voces que denuncian las muertes. Como respuesta a las críticas sobre los asesinatos extrajudiciales, Duterte en varias ocasiones lanzó duros ataques a obispo y sacerdotes. “Cuando critica al gobierno sobre el tema- declara el p. Gariguez- la Iglesia cumple con su obligación moral y a su misión profética. No está movida por intereses políticos. La Iglesia debe expresarse y manifestar el propio desprecio por estos homicidios, sobre todo cuando están involucradas personas inocentes como Kian”.

Un informe de la Agencia filipina antidroga (PDEA) afirma que, desde julio de 2016 a octubre de 2018, fueron 4.999 los asesinados en las operaciones antidroga realizadas por las autoridades del gobierno. Los activistas por los derechos humanos declaran que el número está más vecino a las 13 mil unidades y que los dos tercios están constituidos por víctimas de ejecuciones sumarias. Los responsables serían los “escuadrones de la muerte”, asesinos a sueldo apoyados por la policía. El Centro por los derechos legales y el desarrollo de los niños dijo que Kian era uno de los 54 menores, de edad comprendida entre 1 y los 17 años, asesinados hasta ahora en la guerra a la droga de Duterte