Acuerdo entre EEUU y talibanes para la paz en Afganistán: es ‘absurdo’ excluir al gobierno de Kabul

Se llevaron a cabo negociaciones en Qatar, entre el enviado de Donald Trump y facciones de los talibanes. El contingente militar de los EEUU comprende 14.000 soldados, sobre un total de 16.000 soldados de la OTAN. En Italia, estalla el caso de la ministra de Defensa Trenta, que anuncia el retiro de soldados antes de fin de año.  


Kabul (AsiaNews) – Los Estados Unidos y los talibanes han logrado llegar a un “borrador de entendimiento” para un futuro de paz en Afganistán. Es lo que confirma al New York Times (NYT) el enviado americano Zalmay Khalilzad, quien revela los términos del acuerdo alcanzado tras seis días de negociaciones en Doha, Qatar. El entendimiento prevé el pleno retiro de las tropas estadounidenses del territorio afgano. A cambio, los talibanes de comprometen al cese del fuego y a entablar coloquios directos con el gobierno de Kabul. Al dialogar con AsiaNews, el Pbro. Giuseppe Moretti, capellán de la embajada italiana y responsable de la missio sui iuris de Afganistán hasta el 2015, comenta: “Es absurdo que el gobierno de Kabul haya sido excluido de los diálogos. Hasta que se demuestre lo contrario, el presidente Ashraf Ghani ha sido electo democráticamente. Su exclusión no sólo constituye una descortesía, sino también un error de la diplomacia internacional”.  

Ayer, el enviado de Donald Trump estuvo en la capital afgana para poner a su aliado en conocimiento de la marcha de las negociaciones en Doha. Luego, Khalilzad dijo al NYT: “Los talibanes se han abocado, para satisfacción nuestra, a hacer todo lo posible para impedir que Afganistán se convierta en una plataforma para grupos terroristas internacionales o individuales”.  

Según los datos más recientes, los Estados Unidos aún tienen 14.000 soldados desplegados en Afganistán, sobre un total de 16.000 tropas del contingente de la OTAN. Se trata de la guerra más prolongada que Washington haya conducido jamás, y que desde el 2001 ha costado miles de víctimas, tanto civiles como soldados (3.400 muertos entre la población civil, sólo en 2017). A contrario de sus predecesores (incluido Obama) que siempre tendieron a aumentar el número de tropas, a fines de diciembre se filtró la intención del  presidente Trump de reducir en 5.000 unidades la presencia americana, inmediatamente después del anuncio en el cual el inquilino de la Casa Blanca comunicó el retiro de militares de Siria.

El Padre Moretti subraya que “por ahora, sólo se habla de un acuerdo de principios entre los EEUU y los guerrilleros, pero no ha sido firmando ningún documento oficial”. Sin embargo, agrega, “es muy grave que Kabul no haya sido incluida. Afganistán nunca fue una colonia americana. Si un día los talibanes fuesen a  retornar al poder, es precisamente con el gobierno que deben llegar a un compromiso”.

El sacerdote reafirma que “el único punto firme de la cuestión afgana es que todos los militares se retiren, no sólo los americanos. El punto crucial es negociar el modo en que habrán de hacer su retorno los talibanes. En caso de permanecer Ghani, claramente, los talibanes no podrán repetir  lo que hicieron entre 1996 y 2001. Si decidiesen volver al poder como en los años ’90, entonces las verdaderas refugiadas políticas serán las mujeres afganas, que se verán privadas de sus derechos humanos”.  

La noticia del acuerdo entre los Estados Unidos y los talibanes ya ha tenido repercusiones en los países de la OTAN que tienen contingentes militares en el territorio afgano, como Italia. Los periódicos de hoy reportan el anuncio de la ministra de Defensa, Elisabetta Trenta, que ayer dijo que deseaba retirar la misión de 900 soldados. Sus palabras desataron un incidente de gobierno, dado que fuentes oficiales de la Farnesina rechazaron cualquier discusión en relación a Trenta y al ministerio de Relaciones Exteriores. A tal propósito, el P. Moretti comenta: “Es sorprendente que el ministerio de Relaciones Exteriores no supiese nada. Cabe decir una cosa: en caso de retirarse los americanos, ¿Qué se quedarían haciendo nuestros soldados italianos? Su misión es adiestrar a las tropas locales, pero después de 15 años, ya están muy bien entrenadas”.

El verdadero futuro del país, concluye el Padre Moretti, “es muy distinto de la presencia militar. Si realmente se quiere iniciar un camino de democracia y de paz, los proyectos tienen que ser distintos. La población necesita trabajo, escuelas, hospitales, rutas. Pero sobre todo trabajo, y una vida que infunda mayor serenidad”.