Kerala, violación de una religiosa: la Comisión nacional para las mujeres pide ‘acciones inmediatas’

La oficina estatal quiere impedir el desplazamiento de las religiosas de la religiosas que deberán testimoniar en el proceso contra Mons. Franco Mulakkal, acusado de haber violado a la ex superiora de las Misioneras de Jesús. Las religiosas denuncian de haber sufrido presiones y amenazas.

 


Kochi (AsiaNews) – La Comisión nacional para las mujeres en India  escribió una carta al jefe de ministros de Kerala en la cual pide “acciones inmediatas” para evitar el encajonamiento de la pruebas contra Mons. Franco Mulakkal. Este último es el obispo dimisionario de Jullundur, en Punjab y está investigado en Kerala por la violación de una religiosa. Su proceso languidece desde hace diversos meses y la Comisión teme por lo tanto el sabotaje de las investigaciones.

El caso de la religiosa por el obispo Mulakkal escandalizó a la Iglesia india. La religiosa, ex superiora, ex superiora de las Misioneras de Jesús, en septiembre denunció al prelado por violencia múltiples realizadas entre 2014 y 2016 en un convento de Kuravilangad, en Kottayam (Kerala). Primero no fue escuchada, en cambio su acusación obtuvo la atención de la prensa nacional e internacional cuando cinco co-hermanas organizaron una protesta pública, apoyados por diversos exponentes católicos (uno de ellos murió en circunstancias misteriosas). Pero, después de aquellas protestas, las religiosas recibieron de parte de la nueva madre superiora la orden de transferencia, mientras que ellas quisieran permanecer en Kottayam para estar al lado de la víctima. De hecho temen que. alejándose, los que apoyan al obispo tendrían las manos libres para alterar las pruebas.

Por su parte. Mons. Mullakkal siempre se declaró inocente y a su vez acusa a la presunta víctima de haberlo denunciado sólo para cubrir un relación clandestina suya con un hombre casado. Arrestado por la policía en Kerala, en octubre obtuvo su liberación bajo caución después de 3 semanas en la cárcel y volvió a su diócesis. Mientras tanto la diócesis de Jullundur fue confiada a un administrador temporáneo.

La lentitud de las investigaciones llevó a la Comisión nacional a intervenir. En la misiva enviada a Pinarayi Vijayan, la presidente Rekha Sharma  escribe de haber recibido protestas de parte de sor Neena Rose y sor Ranit Pallasseril, dos de las cinco religiosas que deberían ser transferidas de la St. Francis Mission Home de Kuravilangad, a Kottayam. “Las querellantes sostienen- se lee- que la orden de transferencia tiene sólo como finalidad el dividirlas y de ‘sabotear el caso’ contra Mons. Franco Mulakkal. Además, ellas denuncian haber sufrido presiones y amenazas en cuanto testigos claves en el proceso. Las querellantes son conscientes del peligro que corren sus vidas, si fuesen alejadas a regiones muy distantes”.

La cuestión de los abusos contra la religiosa llevó a la Iglesia católica de Kerala a tratar de remediar el mal sufrido y prevenir nuevas violencias. Hace pocos días los obispos difundieron nuevas líneas guías que reafirman el enfoque de “tolerancia cero” contra sacerdotes y miembros del clero que se manchen de crímenes sexuales contra menores o adultos vulnerables. Sobre el mismo tema del 21 al 24 de febrero se desarrollará en el Vaticano un encuentro, ardientemente deseado por el Papa Francisco. Él volvió a atacar a los violadores que están dentro de la Iglesia, esto lo dijo durante el vuelo de retorno de los Emiratos Árabes Unidos, donde firmó el histórico Documento sobre la Fraternidad humana con el Gran Imán suní de Al-Azhar.