Liberaron al fundamentalista que incitaba a la multitud contra Asia Bibi

Los jueces pusieron en libertad a Khadim Hussain Rizvi y a su mano derecha, Pir Afzal Qadri, en ambos casos, por motivos de salud. Rizvi encabeza el grupo radical islámico Tehreek-Labaik Pakistan que el año pasado paralizó el país tras la absolución de la madre cristiana. En Internet circula un video de un hombre que estaría actualmente en Canadá, con el objetivo de matar a Asia.

 


Lahore (AsiaNews/Agencias) – La Alta corte de Lahore dispuso la libertad bajo caución de Khadim Hussain Rizvi, el líder del grupo fundamentalista islámico Tehreek-Labaik Pakistan (TLP). Él es el radical “agitador de multitudes” que fue arrestado el año pasado, acusado de terrorismo por haber paralizado el país con protestas callejeras, hechos de violencia y cortes de calles tras darse a conocer la sentencia de absolución de Asia Bibi, la madre cristiana condenada a muerte por blasfemia y absuelta tras permanecer nueve años en prisión.

Junto al extremista, también fue liberado el número dos del grupo, Pir Afzal Qadri. Ambos obtuvieron una suspensión de la sentencia hasta el 15 de julio, por motivos de salud. La decisión de los jueces fue tomada a una semana de la liberación de Asia, que pudo finalmente dejar el país y llegar a Canadá, donde ya se encontraban sus hijas.

La libertad bajo caución pareciera tener como objetivo restablecer el equilibrio y la armonía en Pakistán. Sin embargo, ayer, Wilson Chowdhry, presidente del grupo cristiano British Pakistani Christian Association (BPCA), que en los últimos años ha respaldado a la familia de la mujer, denuncia la difusión de nuevas amenazas contra Asia. Se trata de una filmación que mostraría a un radical islámico en Canadá, cuyo objetivo sería asesinarla, y que amenaza a “los enemigos del islam y al gobierno judío, que ha liberado a Asia Bibi”.

Asia Bibi fue absuelta el 13 de octubre de 2018, tras ser acusada de ultrajes al profeta Mahoma. Pasó nueve años en prisión, luego de ser condenada a muerte, aguardando un proceso de apelación que fue continuamente aplazado a causa de las presiones y amenazas sufridas por los jueces, por obra de grupos fundamentalistas.  

Tras la lectura de la sentencia que declaró que la madre cristiana es “no culpable”, en noviembre del año pasado, los fundamentalistas del partido Tehreek-i-Labbaik Pakistan (TLP) paralizaron las principales ciudades de Pakistán, amenazaron de muerte a los jueces del tribunal supremo y al abogado de la mujer, Saiful Malook, quien se vio obligado a huir a los Países Bajos para salvar su vida.

Para evitar una escalada de violencia, el gobierno de Imran Khan llegó a un pacto con los manifestantes y concedió la revisión del veredicto de los jueces supremos. Luego, Asia fue liberada, pero no podía dejar el país, en base a lo estipulado en el acuerdo con los radicales. En enero de este año, los jueces de la Corte suprema pronunciaron, con suma valentía, una sentencia definitiva que rechaza la petición de los radicales islámicos que querían pasar por encima de la sentencia de absolución pronunciada en relación a la mujer cristiana.