El pasado 28 de mayo, 19 alumnas fueron agredidas por Ryuichi Iwasaki, de 51 años. El agresor se lanzó contra el grupo mientras las niñas estaban formadas en fila para subir al autobús de la escuela. En el ataque murieron una niña y un padre, mientras que el homicida se suicidó. El lugar de la tragedia continúa atrayendo multitudes de luto.
Tokio (AsiaNews/Agencias)- Bajo la mirada atenta del personal de seguridad y los padres, esta mañana reiniciaron las lecciones en la Caritas Elementary School, escuela católica de Tama, barrio de Kawasaki (prefectura de Kanagawa). El pasado 28 de mayo, 19 de sus alumnas fueron víctimas de un feroz acuchillamiento de masa en el cual han perdido la vida 3 personas, entre ellas una niña de 11 años y el agresor - muerto suicida. Armado con dos cuchillos de cocina, Ryuichi Iwasaki, de 51 años, se lanzó contra el grupo mientras las niñas estaban en fila para salir al autobús que las habría llevado a la escuela.
Después del ataque, la parada del servicio de transporte fue desplazado; en lugar de los vehículos que llevan el nombre del Instituto, son utilizados autobuses públicos alquilados. Diversos padres prefieren igualmente acompañar a sus propios hijos en sus propios automóviles. Esta mañana, la estación estaba custodiada por numerosos funcionarios escolares, agentes de seguridad y policía. No obstante el clima tenso, algún alumno parecía feliz de reencontrarse con sus amigos. Algunos padres han saludado a sus hijos cuando el autobús paró la escuela, mientras que otros subieron al vehículo con los niños, para acompañarlos hasta el portón de la escuela.
La dirección escolar afirma haber permitido a los estudiantes vestir ropa normal en vez de los uniformes; a los padres de acompañarlos y de irlos a buscar al finalizar las lecciones. Hiroaki Takamatsu, jefe de la secretaria, declara: “Estábamos preocupados sobre cómo se habrían sentido los niños. Sin embargo, no parecían demasiado angustiados, lo cual es un alivio”.
A más de una semana después de la tragedia, el lugar donde sucedió el acuchillamiento de masa continúa atrayendo una multitud en duelo. Una estudiante, dejó un himno y una carta: “Encuentro difícil escribir palabras mías, por lo tanto decidí dejar este himno”, se lee en la nota.
Hanako Kuribayashi, una alumna de la Caritas Elementary School de 11 años, y Satoshi Oyama, un funcionario del ministerio de Exteriores de 39 años y padre de otra joven que frecuenta la escuela, fueron asesinados en la agresión. Ryuichi Iwasaki murió poco después del ataque por una herida auto-inflingida en el cuello. La policía considera que la acción haya sido premeditada, porque Iwasaki había comprado los cuchillos con meses de anticipación. El hombre fue visto visitar la zona unos 4 días antes del ataque, pero el motivo sigue siendo desconocido. Las investigaciones se está todavía concentrando sobre la salud mental del homicida.