La policía acusa a cerca de 40 personas, activas contra los abusos de la presidencia Duterte. Entre los investigados, el vice- presidente de Filipinas. Líder de la Conferencia episcopal: “No se puede creer, vamos más allá de los racional”.
Manila (AsiaNews/Agencias) – Las acusaciones de sedición contra cuatro obispos y tres sacerdotes católicos “son increíbles, vamos más allá de los racional. Se trata de personas que aman a la patria y tienen una conciencia límpida”. Lo dice el presidente de la Conferencia episcopal filipinas. Mons. Rómulo Valles, comentando la puesta en estado de acusación confirmada por la policía.
Las denuncias fueron presentadas hace algunos días por el Grupo para las investigaciones criminales de la policía de Estado. Más de 40 personas están hoy acusada por “incitamiento a la sedición, calumnias online y obstáculo a la justicia”: entre éstas hay también acusaciones contra el vice presidente filipino y diversos miembros de la oposición.
Los obispos acusados son Mons. Honesto Ongtioco de Cubao, Mons. Pablo Virgilio David de Kalookan, Mons. Teodoro Bacani de Novaliches y Mons. Sócrates Villegas de Lingayen-Dagupan. Los sacerdotes son el p. Flaviano Villanueva, el p. Albert Alejo y el p. Robert Reyes. Justamente el p. Reyes comenta: “Se trata de una movida patética para distraer a la población del evento del totalitarismo. Esta decisión podría despertar a los indecisos y a los indiferentes”.
Según el p. Jerome Secillano, presidente de la Oficina Asuntos públicos de la Conferencia episcopal, la puesta en estado de acusación “representa una clara elección. Se quiere asustar a aquellos clérigos que critican el gobierno y hacerlos callar. Nuestros hermanos jamás han combatido al gobierno o a Duterte: están contra las políticas represivas que dañan a los pobres”.