Carta abierta: Que Hong Kong no se convierta en un centro de represiĆ³n

Personalidades prominentes de 18 naciones del mundo escriben a la Jefa del Ejecutivo del Territorio: “Basta de violencias, vuelvan al diálogo y realicen las reformas pedidas por el pueblo. Solamente de este modo podrán conservar la grandeza de Hong Kong”. El ejecutivo local responde con firmeza: “Hechos no verdaderos, los extranjeros no deben interferir en nuestros asuntos internos”.

 


Hong Kong (AsiaNews) – Hong Kong “es una de las grandes ciudades del mundo, uno de los centros financieros y comerciales más importantes y una importante vía de acceso hacia China y al resto de Asia, Sería una tragedia si perdiese estas características y se hiciese famosa sólo por la represión”. Es el sentido de una carta abierta dirigida la Jefa del Ejecutivo del Territorio, Carrie Lam Cheng Yuet-ngor, y firmada por 40 personalidades prominentes de 18 naciones del mundo.

Entre los que firmaron están el cardenal birmano Charles Maung Bo, como jefe de la Federación de las Conferencias episcopal asiáticas; el ex vocero de la Cámara de los Comunes inglesa, John Bercow; el ex embajador surcoreano para los derechos humanos, Lee Jung-hoon; el ex presidente de la All India Catholic Union, John Dayal y muchos otros. 

La carta pone a la Jefa del Ejecutivo una serie de preguntas respecto a la actitud brutal de la policía contra los manifestantes que- desde hace meses- piden reformas democráticas y el alejamiento de la esfera de represión realizada por China continental. Si se elige el diálogo y se realizan las reformas, escriben, “la reconciliación y la reunificación del tejido social serán posibles”. 

Pequeños grupos de manifestantes, agregan las personalidades involucradas en la petición, “fueron violentos”. “Queremos quede claro que no perdonamos ni toleramos en algún modo la violencia y el vandalismo. Sin embargo, la abrumadora mayoría de los manifestantes obraron en modo pacífico pero igualmente fue agredida con violencia por la policía. En segundo lugar, la violencia se debe siempre condenar pero puede nacer de frustraciones y desesperación. Que no involucran solamente a aquellos que salieron a la calle, sino también a sus hijos y a aquellos que desde 2047 (año del pleno retorno del Territorio bajo el control de Beijing) llamarán ‘casa’ Hong Kong”.

El gobierno de la ex colonia británica respondió con firmeza al pedido. Un vocero de la señora Lam declaró que “políticos y organizaciones extranjeras no deberían interferir de ningún modo en los asuntos internos de hong Kong. Estamos muy preocupados porque los hechos contenidos en la carta están equivocados y llevan a conclusiones equivocadas. El gobierno debe rechazarlos”.