Beijing censura la investigación científica sobre el coronavirus

En base a una directiva de gobierno, todos los estudios sobre el Covid-19 deberán ser examinados minuciosamente por las autoridades centrales. El gobierno busca controlar todo lo que se dice sobre la epidemia y transmitir la idea de que ésta no tuvo su origen en China. Los médicos de Wuhan fueron los primeros en sufrir la mordaza. 

 


Beijing (AsiaNews) – China censura los estudios científicos sobre los orígenes del coronavirus. Es lo que se desprende de una directiva de gobierno – que fue rápidamente retirada  de la web – publicada por la Universidad Fudan de Shanghái y por el Instituto Universitario de Wuhan. 

En base a las nuevas normativas, todas las investigaciones académicas sobre el Covid-19 deberán ser controladas por un grupo de trabajo del Consejo de Estado antes de su posible publicación. Desde que estalló la pandemia en el mes de enero, una serie de artículos de especialistas chinos aparecieron en las revistas médicas internacionales más prestigiosas. En algunas de estas publicaciones se plantean dudas respecto a las cifras oficiales de víctimas en China, y se cuestiona el modo en que los líderes de Beijing afrontaron la emergencia. 

En diálogo con CNN, un investigador chino sostiene que su gobierno está tratando de controlar todo lo que se dice sobre la epidemia, y exponer la idea de que ésta no tuvo su origen en China. Según dice, este filtro del gobierno pone en riesgo la imparcialidad de la investigación científica en el país. 

Beijing es acusada de haber ocultado la verdad sobre la difusión inicial del virus, aplicando una mordaza sobre los médicos de Wuhan, que fueron los primeros en alertar sobre la situación. A la Dra. Ai Fen, jefa del departamento de Emergencias en el Hospital Central de la capital de Hubei, se le ordenó callar para no crear pánico. Ai, de quien no se tienen noticias desde mediados de marzo, compartió información sensible con algunos colegas. Entre ellos, con el Dr. Li Wenliang, que luego fue detenido por la policía, por haber hablado del virus. Li murió a causa de la infección el 7 de febrero, seguido por otros médicos de Wuhan.