Obispo de Faisalabad: con leyes y políticas injustas, no se garantiza la igualdad en el país
de Shafique Khokhar

En la vigilia del Día de las minorías, exponentes religiosos y de la sociedad civil expresan su preocupación por el modo en que el gobierno afronta el problema de las minorías. Los cupos son inútiles si no existen mecanismos para aplicar las reglas. Una educación imparcial puede favorecer la cohesión social y la armonía. Se requieren grandes esfuerzos para convertir la representación de las minorías en participación. 

 


Faisalabad (AsiaNews) – “Con leyes y políticas injustas, jamás podrán garantizar la igualdad en el país”. Son las declaraciones de ayer del obispo de Faisalabad, mons. Indrias Rehmat, en la vigilia del Día de las minorías. Mons. Rehmat intervino en una conferencia sobre el respeto y la promoción de la diversidad, junto a otros exponentes religiosos y algunos representantes de la sociedad civil. 

Para quienes asistieron a la iniciativa, el gobierno no afronta con seriedad el problema de las minorías. En este sentido, subrayaron que al carecer de un mecanismo de actuación válido, los cupos reservados a las minorías terminan siendo un esfuerzo inútil para garantizar la igualdad política, religiosa, social y económica.

Varias fuentes coinciden en que ahmadíes, cristianos, hindúes, sijs y chítas son las minorías más discriminadas en Pakistán, un país de 212 millones de habitantes, cuya mayor parte es de etnia punjabí y credo musulmán sunita. Los católicos suman casi 2 millones (1% de la población); y otro tanto, los cristianos protestantes. 

Rizwan Ullah Kokab, docente de Histria en la GC University, resalta que Pakistán es una galaxia de religiones y territorios con culturas diversas. Es por ello que el enfoque “etnocéntrico” de los gobernantes no resulta útil en la causa de la unidad nacional. Según Kokab, la educación puede favorecer la cohesión social y la armonía, siempre que la primera tenga una mirada imparcial.

Hamid Yaseem, secretario general adjunto de la Unión Federal de periodistas pakistaníes, también centró su mirada en la escuela: “La política educativa debe incorporar el concepto de derechos humanos, justicia social, coexistencia pacífica y no-discriminación”. 

El padre Kahid Rasheed Asi nota que en Pakistán, las minorías aún están luchando para proteger su identidad y todavía es poco el espacio que encuentran en la sociedad: “se requieren grandes esfuerzos para hacer frente a la discriminación y convertir la representación de las minorías en verdadera participación”. 

Najma Afazl es un ex parlamentario y acusa a quienes tienen la responsabilidad de tomar decisiones en el ámbito público. A su modo de ver, éstos son incapaces de adoptar medidas prácticas para demostrar respeto hacia la diversidad.