¿Qué impulsa a un chino a convertirse al cristianismo? (I)
de Bernardo Cervellera

Un pastor protestante realizó un sondeo nacional durante dos años (2017-2018) para comprender “los mecanismos y las características” del vertiginoso crecimiento de las comunidades protestantes en la República Popular China. Pese a los problemas de seguridad y control, participaron 120 iglesias de 18 provincias del país.

 


Roma (AsiaNews) - ¿Qué impulsa a un chino a convertirse al cristianismo? ¿Qué deseo siente él o ella que se concreta al ser bautizado? ¿Qué impacto tiene la tradición familiar, el testimonio de un amigo o de un pastor? ¿Cómo están formadas las comunidades cristianas de China? Son algunas de las preguntas a las que un pastor, escritor e investigador, que firma con el seudónimo Steve Z., ha intentado responder con un sondeo cuyos resultados fueron publicados en varios artículos en China Change, un sitio protestante muy calificado, durante el mes de agosto de 2020.

En el primero de una serie de cuatro artículos, “Seeking to Understand Church Growth in China (Tratando de comprender el crecimiento de la Iglesia en China)”, publicado el 10 de agosto pasado, el pastor hace notar que su investigación es la primera que intenta comprender “los mecanismos y las características” del vertiginoso crecimiento de las comunidades protestantes en la República Popular China. En efecto, fuentes protestantes afirman que el número de fieles protestantes ronda los 100 millones; otras más sobrias se limitan a 60 millones. De todos modos, su número es muy superior al de las fuentes oficiales. Por ejemplo, el libro azul de la Academia china de Ciencias Sociales, publicado en 2010, registra solo 23,05 millones para los protestantes, distinguiendo entre 15,56 millones de bautizados y 7,49 de no bautizados. En 2018, el Libro blanco del Consejo de Estado, fija en 30 millones el número de cristianos protestantes.

El sondeo del pastor Steve Z. no es un censo a nivel nacional y por lo tanto no responde a la pregunta sobre cuántos protestantes hay en China, sino que intenta comprender las razones por las cuales crecen las comunidades.

El estudio se llevó a cabo en 2017 y 2018, por medio de visitas o envío de cuestionarios a fieles comunes o líderes de iglesias. El trabajo abarcó sólo las comunidades chinas (han) y no las de minorías étnicas, pero recogió datos de comunidades oficiales y no oficiales (Tres autonomías), rurales y urbanas, migrantes y estables.

Todas las respuestas al cuestionario debían ser escritas. Esto dio origen a algunas dificultades. El período durante el cual se llevó a cabo el sondeo corresponde a la época en que se intensificó la represión del gobierno contra las iglesias y las religiones - sobre todo después de que entraron en vigor los Nuevos reglamentos sobre actividades religiosas -, lo que determinó que se contestaran o no las preguntas, considerando los problemas de “seguridad y control”. 

El autor informa que de las 1000 iglesias contactadas, sólo algo más del 10% - 120 iglesias - adhirieron al sondeo. Debido a la demora con que se entregaron las respuestas, el estudio se basa en 70 iglesias de 18 provincias de China. No hay resultados de Xinjiang, Tíbet, Yunnan y Guangxi, porque no fueron invitadas al sondeo debido a las minorías, y tampoco de Jilin, Hebei, Tianjin, Jiangsu, Shanghai, Fujian, Jiangxi, Ningxia, y Hainan.

Los cuestionarios de las 18 provincias que enviaron resultados comprenden 1655 cuestionarios de fieles y 110 cuestionarios de líderes o predicadores de iglesias.

Las iglesias que participaron se pueden subdividir de la siguiente manera: 11 iglesias rurales; 43 iglesias urbanas; 5 iglesias de migrantes; 6 iglesias oficiales (tres autonomías). Ninguna de estas iglesias fue fundada por misioneros extranjeros; tres de ellas tienen una historia que comenzó en 1979.

Los resultados del sondeo serán presentados en la segunda parte.