Confirmaron el arresto de la editora Geng Xiaonan: defendiĆ³ al profesor disidente Xu Zhangrun

Fue detenida el 9 de septiembre junto al marido, de quien no se tienen noticias. Se la acusa por la publicación ilegal de más de 8.000 textos. Xu: Es una excusa; la arrestaron por haberme defendido luego de mi encarcelación. El jurista es un conocido crítico del presidente chino Xi Jinping.


Beijing (AsiaNews) – El Ministerio Público de la capital formalizó el arresto de Geng Xiaonan, una célebre editora que defendió al académico y disidente Xu Zhangrun. La noticia la dio a conocer su abogado, Shang Baojun, en una entrevista del 20 de octubre con el South China Morning Post (SCMP), en la que subrayó que no puede brindar más información, ya que las autoridades le advirtieron que no debía hablar con medios extranjeros. 

Geng Xiaonan fue detenida el 9 de septiembre junto a su marido; él también está en prisión, pero Shang no tiene noticias suyas. La pareja es propietaria de la casa editorial Ruyia Books; en los últimos años organizaron varias iniciativas culturales y artísticas con la participación de intelectuales y artistas independientes. 

Según informes de prensa, los dos editores están acusados de “operaciones comerciales ilícitas”, concretamente de haber publicado ilegalmente más de 8.000 libros. Las normas chinas en materia de publicación de productos editoriales son vagas: sólo las editoriales estatales pueden contar con un número de referencia internacional de un libro (ISBN) y los derechos de distribución; sin embargo, a menudo colaboran con operadores privados para producir textos populares. Con este sistema, es común que las autoridades tomen medidas contra los individuos, si no están de acuerdo con los contenidos y el proceso editorial.

El año pasado la editora, de 46 años, organizó un viaje a Chengdu (Sichuan) con un grupo de académicos. Entre ellos estaba Xu, que en julio pasó seis días en prisión, acusado de “favorecer la prostitución” durante aquella visita, cargo que el rechaza de forma rotunda. Luego de aquella visita, el académico de la Universidad de Qinghua fue despedido del ateneo por “corrupción moral”. 

Según declara Xu en la entrevista brindada hace dos días al SCMP, Geng fue arrestada por un crimen que no cometió: la acusación de actividades ilícitas es una “excusa”, y ella “está pagando el precio por haber salido en mi defensa” frente a las acusaciones del régimen. 

Colegas y amigos afirman que las autoridades inventaron las acusaciones con el fin de desacreditar a Xu - conocido por sus críticas al Presidente Xi Jinping - destruyendo su reputación, y causándole la pérdida de su trabajo. Ya había sido suspendido de la enseñanza en 2019 por un artículo contra la presidencia vitalicia de Xi. En febrero, el jurista había publicado un artículo criticando “la tiranía” del Partido Comunista Chino, al que culpaba de destruir el sistema político del país cuando éste se encaminaba a las reformas, tras la muerte de Mao Zedong.

En el pasado mes de agosto, en una carta dirigida a sus ex alumnos, Xu afirmó que el totalitarismo está condenado al fracaso, y que tarde o temprano, la libertad llegará a China. El jurista concluyó su mensaje diciendo que continuará “desafiando a las autoridades hasta la muerte”.