Miles de graduados iraníes escapan al exterior en busca de fortuna
de Hosein Alizade

Las condiciones sociales y económicas no les permiten encontrar empleo en su área de competencia. Cada año abandonan el país entre 150.000 y 180.000. La juventud educada ha perdido la confianza. Los planes de ayuda del gobierno no lograron detener la fuga. Otro golpe para la debilitada economía nacional.

 


Teherán (AsiaNews) - Miles de jóvenes iraníes siguen buscando fortuna en el exterior. En el país hay muchos jóvenes que han terminado sus estudios y están ​​dispuestos a trabajar o emprender un negocio en su campo de competencia, pero las condiciones sociales y económicas no se lo permiten. La situación se ha agravado en los últimos años debido a las sanciones internacionales por el programa nuclear y la devaluación de la moneda nacional.

Según fuentes académicas, de 2015 a 2019, entre 150 mil y 180 mil jóvenes con estudios abandonaron Irán cada año para buscar trabajo en el exterior, sobre todo en países como Canadá. Es la segunda fuga de cerebros más grande del mundo. Las estadísticas oficiales informan que entre estos migrantes se encuentran los mejores graduados, artistas y deportistas de la nación. Los analistas señalan que en términos de ingresos potenciales, la fuga de cerebros iraní equivale al total de los ingresos por el petróleo.

Mehran, un ingeniero electrónico que espera encontrar trabajo en Alemania, cuenta a AsiaNews que hace dos años que está buscando trabajo en su campo: "Amo a mi país, pero si me quedo en esta situación, perderé la confianza en mí mismo y la esperanza en el futuro".

El gobierno iraní ha intentado detener la fuga de jóvenes con un plan de incentivos, otorgando préstamos y privilegios a los recién graduados. Por ejemplo, la posibilidad de registrar una empresa nueva para aquellos que hayan demostrado excelentes habilidades técnicas. Sin embargo, hasta el momento los programas parecen haber fracasado.

Saeed, un ingeniero biotecnológico de 28 años que se inscribió para recibir la ayuda, cuenta que durante un año y medio estuvo tratando de obtener el préstamo. Era para poner en marcha un proyecto en el campo de los equipos para experimentos celulares. Como no contaba con el respaldo de una persona en la oficina pertinente, no pudo competir con los otros aspirantes y terminó retirando la solicitud.

Los expertos consideran que se requiere una planificación seria para aprovechar plenamente la gran cantidad de especialistas que hay en el país. Advierten que si el gobierno no ofrece programas eficaces para reducir la fuga de cerebros, en pocos años el país se encontrará sin profesionales calificados. Otro golpe fatal para la debilitada economía nacional.