Beijing festeja la recuperaciĆ³n de la cabeza de caballo de bronce, robada del antiguo palacio de verano
de Wang Zhicheng

Los medios celebran "la vuelta a casa después de 160 años". La obra fue robada y contrabandeada en 1860, después de la destrucción del Yuanmingyuan por las tropas anglo-francesas. Para el Partido Comunista Chino, el robo de las esculturas es un símbolo del "siglo de la humillación". La cabeza de caballo de bronce fue donada a China por el magnate Stanley Ho. Dos jesuitas, Castiglione y Benoist, estaban entre los arquitectos y decoradores del Yuanmingyuan.

 


Beijing (AsiaNews) – Con una ceremonia y una exposición inaugurada hoy en el Palacio de Verano, las autoridades de Beijing celebraron el regreso de una cabeza de caballo de bronce, que pertenecía a la decoración del antiguo Palacio de Verano (Yuanmingyuan), destruido por las fuerzas anglo-francesas en 1860. La pieza recuperada formaba parte de un gigantesco reloj de agua, decorado con las cabezas de los 12 animales del zodíaco chino. Cuando el Yuanmingyuan fue invadido y destruido al final de la Segunda Guerra del Opio (1856-1860), las esculturas fueron robadas y llevadas al extranjero. Hasta ahora, el gobierno chino logró recuperar siete; se desconoce el paradero de las cinco restantes (perro, gallo, dragón, oveja y serpiente). Los medios de comunicación chinos dieron amplia cobertura al tema, con un gran énfasis en este "regreso a casa después de 160 años".

El Partido Comunista Chino siempre ha descrito el robo de las esculturas como un símbolo del "siglo de la humillación" que sufrió China por parte de las potencias extranjeras, que comenzó con la primera guerra del opio (1839-1842) y terminó con la fundación de la República Popular China en 1949.

El Yuanmingyuan era un extenso conjunto de edificios y jardines en la zona de Haidian. Los jesuitas Giuseppe Castiglione (1688-1766) y Michel Benoist (1715-1774) colaboraron en la construcción de la obra.

El caballo de bronce que hoy es motivo de festejos fue donado en 2019 por Stanley Ho, el magnate de los casinos de Macao que murió el pasado mes de mayo. Había comprado la pieza en una subasta de Sotheby's en 2007 por 8,9 millones de dólares.