La Bolsa de Tokio toca su pico máximo en 31 años (a pesar de la pandemia)

El índice Nikkei supera los 30.000 puntos. Las tasas de interés negativas y la gran liquidez monetaria favorecen a las principales acciones mundiales. El mercado bursátil, impulsado por el crecimiento del PIB, el lanzamiento de la campaña de vacunación y el fin de la incertidumbre política en Estados Unidos. Dudas sobre las perspectivas de la economía japonesa después del Covid-19.

 


Tokio (AsiaNews/Agencias) - El índice Nikkei de la Bolsa de Tokio superó esta mañana los 30.000 puntos, marcando un récord en 31 años. Gracias a la inmensa masa de liquidez y a las tasas de interés negativas, las principales acciones del mundo siguen ganando. La cifra contrasta con la de la economía real, que lucha por recuperarse de la crisis del coronavirus.

Para los analistas, el repunte del Nikkei se debe a los buenos resultados del PIB japonés en el último trimestre de 2020: +3% respecto al año anterior; +12,7% respecto al periodo julio-septiembre.

Otro estímulo son las buenas noticias en el ámbito de las vacunas. Ayer, el Ministerio de Salud autorizó el uso del primer fármaco, el del laboratorio estadounidense Pfizer. La campaña de vacunación comenzará esta semana y los trabajadores de la Salud serán los primeros en recibir la inmunización. 

Los inversionistas japoneses también recibieron con beneplácito la absolución del ex presidente estadounidense Donald Trump, en marco del juicio político (impeachment). En su opinión, el rápido cierre de los procedimientos permitirá a la administración Biden acelerar la adopción y aplicación del plan de ayuda contra los efectos del Covid-19, valuado en 1,9 billones de dólares (1.566 millones de euros).

Con un crecimiento del 9%, la cotización del Nikkei está entre las de mejor desempeño  desde principios de año (el índice Dow Jones estadounidense se detuvo en un 3%). A pesar de estos resultados financieros, las perspectivas de la economía japonesa siguen siendo inciertas. Debido a la pandemia, el PIB nacional perdió un 4,8% el año pasado. En diciembre, el gobierno de Yoshihide Suga corrió a cubrirse inyectando 73.600.000 millones de yenes (577.000 millones de euros) en el sistema, lo que elevó el total del estímulo anti-Covid a 315.550.000 millones de yenes (2.473.000 millones de euros).

Sin embargo, varios observadores consideran que las posibilidades de crecimiento del país son limitadas. Japón es excesivamente dependiente de las "industrias del pasado", y carece de gigantes de alta tecnología y crecimiento como Apple y Google en Estados Unidos, o Alibaba y Tencent en China.