Los musulmanes egipcios ahora podrán contribuir a la construcción de iglesias

Luz verde del gobierno: los fieles de Mahoma podrán colaborar -pago mediante- en la construcción o restauración de lugares de culto cristianos. Una decisión que sigue a la fetua emitida a finales de enero por el Gran Muftí egipcio. Pero algunos fieles están en contra: "El cristianismo es una blasfemia".    


El Cairo (AsiaNews/Agencias) - Los musulmanes de Egipto podrán colaborar con los cristianos en la construcción de iglesias, en calidad de "trabajadores asalariados" a todos los efectos. Se trata de un cambio radical para una nación de amplia mayoría islámica donde, en el pasado, esta opción solía considerarse un tabú y los seguidores de Mahoma tenían prohibido colaborar en la construcción de lugares de culto cristianos. 

Tras la luz verde oficial, los musulmanes podrán contribuir a la construcción de cada una de las 44 iglesias que se encuentran actualmente en obra en Egipto. También podrán colaborar en la restauración de las 16 iglesias coptas históricas cuyas obras de remodelación está en curso.

La aprobación del gobierno se vincula a la fetua emitida el 24 de enero por el Gran Mufti de Egipto, Shawki Allam, con la que se concedió a los musulmanes la posibilidad de "trabajar o participar en la construcción de iglesias, a cambio de un salario". Esta decisión fue acogida con satisfacción por activistas y asociaciones de derechos humanos, tanto cristianas como no cristianas, pero provocó reacciones de indignación por parte de algunos fieles islámicos. Mohammad Fouad, un musulmán egipcio, aludió a una "fatwa anómala…” en las redes sociales, y comentó: “El cristianismo es una blasfemia y la blasfemia es el pecado más grave de todos a los ojos de Alá". ¿Cómo podría ayudarles a construir una iglesia, de forma gratuita o pagando?". Menna Mahmoud añade: "Es mucho mejor para un musulmán servir en una mezquita... Oh Alá, no nos lleves a la humillación de servir a las iglesias, sino concédenos el honor de servir sólo a nuestras mezquitas."

Distinta es la opinión del activista cristiano Tom Doyle, de Uncharted Ministries, que habla de un "gran paso" porque en este caso "es el Gobierno el que da luz verde" y “queremos dar las gracias” por ello. Al mismo tiempo, agregó que oran para que se logren mejores relaciones entre cristianos y musulmanes" para el futuro, en Egipto, en todo el Oriente Medio y en el Norte de África (en inglés, MENA). Si Arabia Saudita es "el corazón" del Islam, añade el activista, Egipto sigue siendo "el cerebro" gracias a la presencia de al-Azhar, la principal institución islámica del mundo. El país, concluye, "quiere abrirse" cada vez más.

En los últimos años, bajo el mandato del presidente al-Sisi, se legalizaron cientos de iglesias, ya construidas o en obra. Sin embargo, todavía hay miles de lugares de culto y edificios que aguardan el permiso de construcción de parte de las autoridades.

En una nación de casi 95 millones de habitantes con una gran mayoría musulmana, los cristianos [especialmente los coptos ortodoxos] representan una minoría considerable, con un 10% del total. Entre 2016 y 2017, el país vivió una serie de atentados sangrientos, que afectaron a la comunidad cristiana. En relación con los atentados, un tribunal militar condenó a muerte a 17 personas; sin embargo, la mano dura de las autoridades no sirvió para detener la violencia.