Vídeo-mensaje de Francisco por el centenario del nacimiento del Jeque Mujibur Rahman (que fue primer ministro de Bangladés, tras la independencia) y el 50º aniversario de la independencia del país.
Ciudad del Vaticano (AsiaNews) – La “cultura del encuentro y el diálogo” que caracteriza a Bangladés fue recordada hoy por el Papa Francisco en el video-mensaje enviado al Presidente, al Primer Ministro y al pueblo de Bangladés con motivo del centenario del nacimiento del jeque Mujibur Rahman (que fue primer ministro de Bangladés, tras la independencia) y el 50º aniversario de la independencia del país.
En el mensaje, Francisco dijo que “Bangladés - "Bengala de oro" (Sonar Bangla)- es un país de rara belleza natural y una nación moderna, que se esfuerza por mantener la unidad de la lengua y la cultura con el respeto a las diversas tradiciones y comunidades que la habitan. Este es uno de los legados que el jeque Mujibur Rahman dejó a todos los bangladesíes. Promovió una cultura de encuentro y diálogo, caracterizada por la sabiduría y por una visión amplia y previsora. Estaba convencido de que sólo en una sociedad pluralista e inclusiva, en la que cada persona pueda vivir en libertad, paz y seguridad, solo así, se puede construir un mundo más justo y fraternal”.
“Bangladés es un Estado joven y siempre ha tenido un lugar especial en el corazón de los Papas, que desde el principio han expresado solidaridad a su pueblo, han tratado de acompañarlo en la superación de las adversidades iniciales y lo han sostenido en la exigente tarea de construir y desarrollar la Nación”.
“Espero que las buenas relaciones entre la Santa Sede y Bangladés sigan floreciendo. Confío también en que el clima cada vez más favorable de encuentro y diálogo interreligioso, que he podido experimentar durante mi visita, siga permitiendo a los creyentes expresar libremente sus convicciones más profundas sobre el significado y la finalidad de la vida, y contribuya así a promover los valores espirituales que son el fundamento seguro de una sociedad pacífica y justa”.
“Queridos hermanos y hermanas, mientras ustedes conmemoran el cincuenta aniversario de su independencia, renuevo mi firme convicción de que el futuro de la democracia y la salud de la vida política de Bangladés están esencialmente vinculados a sus ideales fundacionales y al patrimonio de diálogo sincero y de respeto de la legítima diversidad que ustedes han intentado alcanzar en estos años”.
“Como amigo de Bangladés, los animo a todos y a cada uno de ustedes, especialmente a las jóvenes generaciones, a renovar el esfuerzo de trabajar por la paz y la prosperidad de la noble nación que representan. Y les pido a todos que prosigan con su compromiso de generosidad y ayuda humanitaria a los refugiados, a los más pobres, a los desfavorecidos y a los que no tienen voz”.
“Con estos cordiales deseos invoco sobre el Golden Bangladesh y sobre todos sus ciudadanos abundantes bendiciones divinas”.