Se publicó el informe de la Organización Mundial de la Salud sobre el origen de la pandemia. La transmisión a los humanos a través de un animal sigue siendo la hipótesis más probable. El responsable de la OMS revela que los chinos no proporcionaron todos los datos. Gobierno estadounidense: Beijing debe garantizar que los investigadores tengan pleno acceso a los datos.
Beijing (AsiaNews/Agencias) – Se necesitan nuevas investigaciones para descartar que la pandemia de Covid-19 se haya propagado desde un laboratorio de Wuhan (Hubei), donde la enfermedad apareció por primera vez a finales de 2019. Así lo afirmó ayer Tedros Adhanom Ghebreyesus, director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), al presentar los resultados de la investigación realizada en China por un equipo de investigación de la OMS cuya tarea es descubrir el origen del coronavirus.
Tedros reiteró lo que el grupo de expertos había dicho en enero: que la hipótesis más probable es que la enfermedad haya sido transmitida a los seres humanos a través de una especie "intermedia" (un murciélago). Según la organización, es bastante improbable que el virus se haya propagado por un accidente en el Instituto de Virología de Wuhan; sin embargo, para disipar todas las dudas es necesario que un equipo de especialistas profundice en el estudio.
El líder de la OMS dejó claro que todas las opciones siguen estando sobre la mesa. Subrayó que los investigadores no tuvieron acceso a todos los datos en bruto. Para las nuevas investigaciones, Tedros pidió a Beijing que compartiera la información solicitada de forma más completa y oportuna.
El régimen chino siempre ha descartado la teoría de la "fuga del laboratorio". Los medios de comunicación estatales chinos plantearon la hipótesis de que el Covid llegó a Wuhan a través de alimentos congelados importados del extranjero.
Los analistas destacan que Tedros utilizó un tono diferente al dirigirse al gobierno chino. Desde el estallido de la pandemia a finales de 2019 y principios de 2020, la OMS muchas veces fue acusada de encubrir a China, que, para muchos países, mintió sobre la propagación del coronavirus.
El ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump, definió al director de la OMS como una "marioneta" de Beijing. Tedros habría colaborado con las autoridades chinas para encubrir y retrasar la declaración de transmisibilidad del virus entre humanos y la declaración de emergencia mundial, aceptando que los expertos de la OMS no viajaran a Wuhan al desatarse la crisis sanitaria.
En respuesta al informe de la OMS, Washington y otros 13 gobiernos (incluidos los de Australia, Japón, Corea del Sur e Israel) expresaron su preocupación por los resultados presentados. Piden a China que garantice el pleno acceso de los investigadores a los datos. Desde un principio, varios observadores cuestionaron la eficacia de la misión en Wuhan: el grupo de expertos tuvo que seguir un calendario de visitas fijado por el gobierno chino, no pudo acceder a los datos originales, y tampoco se permitió una libre comunicación entre los miembros del equipo y con los periodistas.