Rangún, huelga de los huevos (de Pascua). La Asean se moviliza (tal vez)
de Francis Khoo Thwe

Manifestaciones con huevos pintados o escritos con leyendas a favor de la democracia. Participaron cristianos, musulmanes, hindúes, budistas y miembros de diversas etnias en una manifestación de unidad contra el golpe militar. Una persona asesinada ayer en Sagaing. Hasta ahora, el ejército ha matado al menos a 564 personas. Una empresa alemana se niega a imprimir billetes para la junta. Brunei, como presidente de la Asean, propone una reunión sobre la situación en Myanmar. Cuenta con el apoyo de Indonesia, Malasia, Filipinas y Singapur.

 


Rangún (AsiaNews) - El domingo de Pascua se realizó en diversas ciudades del país la llamada “huelga de los huevos”,  mientras la comunidad internacional - y especialmente la Asean - intenta encontrar vías para aliviar la tensión en Myanmar.

El 4 de abril los manifestantes marcharon saludando con tres dedos levantados y llevando un huevo pintado en la mano; otros los pusieron en fila en la calle; otros los distribuyeron a los transeúntes con leyendas pintadas a favor de la democracia. Sobre todo en ciudades como Rangún y Mandalay, cristianos, musulmanes, hindúes, budistas y miembros de diversos grupos étnicos participaron en la manifestación "pascual", en una demostración de unidad contra el golpe de Estado militar.

Ayer las manifestaciones de disidencia se caracterizaron por los aplausos. El gesto, según se explica en Facebook, se propone honrar “a los grupos étnicos armados y a los jóvenes de la Generación Z que luchan por la revolución".

En la región central de Sagaing, una persona murió a manos de las fuerzas de seguridad que intentaban dispersar la protesta. Según las organizaciones locales, los militares han matado al menos a 564 personas hasta ahora.

Las continuas manifestaciones y la unidad entre los grupos están empujando a varias empresas internacionales a cancelar todos los contratos económicos con la junta. Una empresa alemana, Giesecke-Devrient, decidió recientemente interrumpir su compromiso de imprimir billetes para el país. Otras empresas de Japón y Corea del Sur han hecho lo mismo.

El gobierno de Seúl es uno de los más críticos con el régimen de la junta. El presidente Moon Jae-in ha pedido reiteradamente que termine el "uso de la violencia contra el pueblo de Myanmar". El parlamento de Seúl y muchos gobernantes ven en la parábola de Myanmar el camino recorrido por Corea del Sur, de la dictadura militar a la democracia, que no estuvo libre de luchas y enfrentamientos entre la población indefensa y las fuerzas armadas.

La ASEAN (Asociación de Naciones del Sudeste Asiático) hasta ahora solo ha exhortado a poner fin a la violencia, siguiendo el principio de no intervención en los asuntos internos de un país miembro. Pero con el aumento de las tensiones, lo que sucede en Myanmar corre el riesgo de afectar también a los países de la región, planteando el interrogante de la democracia  - varios países de la ASEAN son dictaduras militares o casi - y arrastrando miles de prófugos birmanos hacia sus fronteras.

Es por eso que Brunei, actual presidente de la Asean, ha propuesto un encuentro de la Asociación para discutir la situación en Myanmar. Se espera que la reunión tenga lugar en Yakarta. Malasia, Indonesia y Filipinas apoyan la convocatoria, lo mismo que Singapur. Pero hasta el momento no se ha anunciado una fecha.