El Covid ya mató a 168 sacerdotes y 143 religiosas en la India
de Nirmala Carvalho

El clero y las religiosas, afectados en un porcentaje mucho mayor en comparación con el resto de la población. El capuchino P. Mathew recoge los datos: "Muchos están en la franja de los 40 años de edad. Muchas de las monjas que murieron por la pandemia trabajaban en zonas rurales, donde no hay una atención sanitaria adecuada".


Bombay (AsiaNews) - La pandemia ha matado hasta ahora a 168 sacerdotes y 143 monjas en la India. El padre Suresh Mathew, fraile capuchino y jefe de redacción de la revista Indian Currents, lleva un recuento actualizado de las víctimas de la pandemia en el ámbito del clero y los religiosos. Estas cifras siguen creciendo, ya que el número de muertos sigue siendo elevado en el país: el gobierno hoy informó de 4.209 víctimas de Covid-19 en las últimas 24 horas; el país se aproxima al umbral de los 300.000 muertos desde el inicio de la pandemia.

Teniendo en mente este panorama general, el padre Mathew cuenta a AsiaNews sobre su investigación: "Ya durante la primera oleada supimos de sacerdotes que habían perdido la vida. Sin embargo, en la segunda ola, y sobre todo a partir de Semana Santa, las noticias sobre sacerdotes fallecidos a causa del coronavirus se volvieron cotidianas. Como misionero, quería saber el número de hermanos que habían muerto por llevar adelante su servicio pastoral. Así que, como periodista, empecé a elaborar una lista: me puse en contacto con el secretario de la Conferencia Episcopal (CBCI), que me dio inmediatamente veinte nombres; José Kavi, director del sitio web Matters India, me proporcionó otros. Envié esta primera lista a todos los obispos del país y algunos contestaron completándola o precisando que en realidad parte de las muertes no se debían a Covid-19. En la actualidad, mis datos registran 168 sacerdotes -incluidos 3 obispos- y 143 religiosas que han muerto a causa del coronavirus".

Más allá de las cifras globales, hay algunos elementos que llaman la atención: "La tasa de mortalidad entre los sacerdotes -continúa el P. Mathew- es más alta que la media nacional, quizá porque han ejercido su ministerio pastoral durante el tiempo de Pascua. Un hecho importante es que muchos sacerdotes que murieron de Covid-19 tenían alrededor de 40 años, por lo que estaban en la flor de la vida. No fueron vacunados, ya que en abril las dosis se administraron sólo a los mayores de 45 años. Tenemos que entender por qué murieron, no pueden ser meros números”.

“Estas muertes son la forma más elevada de caridad cristiana, porque murieron sirviendo”, continúa el fraile capuchino. “Algunos contrajeron el virus mientras presidían los funerales de sus hermanos, a pesar de que siguieron todos los protocolos contra el Covid. Muchas hermanas murieron en zonas rurales, donde no hay instalaciones adecuadas para la atención sanitaria. Trabajaron entre los pobres y marginados, donde no hay ni siquiera un centro médico de atención primaria. Uno de los sacerdotes muertos tuvo que recorrer 450 kilómetros para ser trasladado a un hospital de Ghaziabad, muchas monjas del norte murieron por esta falta de infraestructuras".

Algunas congregaciones han sido azotadas de un modo particular: "Al menos 23 de los sacerdotes fallecidos por Covid-19 eran jesuitas, mientras que 12 eran monjas de las Misioneras de la Caridad, la congregación fundada por la Madre Teresa”, comenta el padre Mathew. “Aunque fueran ancianos o tuvieran otras enfermedades, seguían prestando su servicio a la comunidad, especialmente entre los leprosos. El Covid-19 fue un predicador silencioso que nos recordó el mensaje de Jesús: entrega tu vida o ya estarás muerto. Nos ha brindado una mirada nueva sobre la oración y la devoción. En poco tiempo podemos volver a ser polvo, cenizas, así que centrémonos en la compasión, la generosidad y la amabilidad con los demás. Este es el testimonio del amor de Cristo que ofrecieron hasta el final los sacerdotes y monjas que murieron a causa de Covid-19 en la India".