Biskek: fetua a favor de la vacunaciĆ³n contra el Covid
de Vladimir Rozanskij

Los ulemas kirguisos sostienen que la vacuna no contradice las normas del Islam. En el país comenzó a administrarse la vacuna china Sinopharm. Hasta ahora, el gobierno había adoptado una posición negacionista con respecto al virus. A la pandemia se suma el problema de los refugiados que huyen de Afganistán.


Moscú (AsiaNews) - Los ulemas de Kirguistán confirmaron ayer la fetua emitida días atrás, que invitaba a todos los creyentes musulmanes a vacunarse contra el Covid-19. La Oficina de Prensa de los Muftíes de Kirguistán anunció que el Consejo de Ulemas se reunió la semana pasada y acordó que la vacunación no contradice las normas del Islam. "Aprobamos la declaración del Ministerio de Salud, en la que se afirma que la vacuna no es perjudicial, y es la única defensa contra la propagación de la pandemia".

En los últimos días, el muftí de la República, Zamir Rakiev, y miembros del Consejo de Ulemas recibieron la vacuna china Sinopharm. Para iniciar la vacunación masiva, China había enviado el 11 de julio 1.250 dosis a Kirguistán. Hasta ahora, las autoridades kirguisas habían mantenido una postura muy negacionista, como otros países vecinos de Asia Central. Actualmente hay 738 puntos de vacunación móviles en todo Kirguistán.

Según los últimos datos, en Kirguistán, el total de contagiados de coronavirus asciende a casi 150.000. A esta cifra hay que sumar muchos casos descartados y diagnosticados como “neumonía atípica”- que no fueron tratados en los hospitales. Desde el comienzo de la pandemia, según las cifras oficiales, 2.143 personas han muerto por Covid en todo el país. Cabe recordar que en Kirguistán rige el estado de emergencia, con varias medidas de restricción y aislamiento.

La administración religiosa del Islam kirguiso también canceló las concentraciones en las calles con motivo de la fiesta del Eid al-Adha, que este año cae el 20 de julio. Las autoridades religiosas precisaron que las oraciones en las mezquitas por la "fiesta del sacrificio" o "degüello", conocida aquí como Kurban-Ayta o Kurban-Bayram, se celebrarán "acatando las medidas sanitarias y epidemiológicas".

A la emergencia sanitaria, se suma otro problema: la delicada situación del conflicto afgano, que afecta a toda la región de Asia Central. Biskek aceptó recibir a más de 340 refugiados afganos de etnia kirguisa, procedentes de Tayikistán. Los ministerios de Asuntos Exteriores de ambos países se han dirigido a la representación regional del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, solicitando ayuda para evacuar a los kirguises que huyen del país.

En los últimos días, cientos de refugiados kirguises huyeron a Tayikistán, llevándose con ellos su ganado. Dos niños murieron en el camino. En este momento, en un campamento de la provincia tayika de Murgabsk están alojados 91 hombres, 77 mujeres y 177 menores procedentes de la aldea afgana de Andemin, en la provincia de Badajshán.

Según el gobierno de Kabul, más de dos millones de refugiados afganos se han visto obligados a huir del país desde el inicio del ataque de los talibanes (que dicen controlar el 85% del territorio nacional). Pakistán anunció que ya no puede acoger a más refugiados, considerando la difícil situación que atraviesa el país por la lucha contra la pandemia.