La declaración de ayer, de los países más desarrollados del mundo. Según Estados Unidos, es de fabricación iraní el dron que atacó el barco en el Golfo de Omán a finales de julio y mató a dos personas. Anteayer tomó posesión del cargo el nuevo presidente Ebrahim Raisi: negó cualquier implicación de la República Islámica
Teherán (AsiaNews/Agencias) - Según los ministros de Asuntos Exteriores del G7, Irán es responsable del ataque con un dron a un petrolero israelí en el Golfo de Omán. "Este fue un ataque dirigido y premeditado y es una clara violación del derecho internacional", dijeron ayer los ministros de las siete naciones más desarrolladas del mundo en una declaración conjunta.
El Mercer Street, de bandera liberiana pero operado por una empresa israelí, fue alcanzado por un dron el 29 de julio. Dos miembros de la tripulación murieron. Irán ha negado cualquier implicación en el hecho, pero los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU renovaron ayer sus acusaciones contra la República Islámica durante una sesión a puerta cerrada.
"La puerta de la diplomacia y el diálogo sigue abierta. Pero si Irán opta por no seguir ese camino, tendrá que rendir cuentas", declaró a la prensa el embajador británico ante la ONU. Se espera que el 9 de agosto el Consejo de Seguridad vuelva a tratar el asunto en una reunión sobre seguridad marítima.
Inmediatamente después del hecho, Estados Unidos e Israel acusaron a Teherán de ser responsable del ataque. Según el ejército estadounidense, en base a las pruebas reunidas hasta ahora, el dron es de fabricación iraní.
Las tensiones se producen en plena toma de posesión del nuevo presidente iraní: el 5 de agosto asumió el cargo el ex jefe del poder judicial Ebrahim Raisi, sustituyendo a Hassan Rouhani, quien es visto como una figura más moderada.