Consagran una iglesia-yurta ortodoxa en la República de Tuvá
de Vladimir Rozanskij

El arzobispo de Corea, Feofan (Kim) presidió la ceremonia. Es la segunda tienda móvil de los pueblos nómadas utilizada como lugar sagrado. Está dedicada a la Beata Matrona de Moscú, una vidente venerada en toda Rusia. La región de Siberia aloja un campo de concentración en el que prestan servicio 7 sacerdotes y 4 diáconos.


Moscú (AsiaNews) - Las autoridades ortodoxas consagraron una "iglesia-yurta" en el pueblo de Kundustug, en la República siberiana de Tuvá, cercano a la frontera con Mongolia. A pesar de la fuerte urbanización de la zona, tanto de los nómadas del campo como habitantes de ciudades y pueblos pequeños, más de la mitad de los mongoles siguen viviendo en las típicas tiendas móviles de los pueblos nómadas de Asia, entre los que figuran kazajos, kirguises y otros.

La ceremonia fue el 26 de agosto y estuvo presidida por el arzobispo de Corea, Feofan (Kim). El prelado es el administrador de la diócesis de Kyzyl, en la república de Tuvá, y también atiende las necesidades de los fieles ortodoxos rusos en Corea y en la parte de Siberia habitada por los mongoles. Feofan es ciudadano ruso, pero en 2006 el gobierno de Seúl le concedió la ciudadanía surcoreana honoraria. La ceremonia se celebró en eslavo-eclesiástico, la lengua litúrgica de la Iglesia ortodoxa rusa, pero algunos de los cánticos se interpretaron en tuvano, una variante turco-oriental del los Montes Sayanes muy extendida en Rusia, Mongolia y entre los uigures de China.

La nueva iglesia situada en la tienda está dedicada a la beata Matrona de Moscú, una vidente de la primera mitad del siglo XX muy venerada en toda Rusia pero especialmente en la región de Tuvá, incluso por los no bautizados. Conocida también como "Matrona, la Ciega", porque era ciega de nacimiento, de adolescente peregrinó por toda Rusia y Siberia. A los 17 años, luego de sufrir un derrame cerebral, perdió la movilidad de sus piernas (por lo que también se la llama "la Sentada"). Sin embargo, hasta su muerte en 1952, siguió recibiendo a peregrinos y enfermos, a los que aconsejaba y curaba. Los tuvanos la consideran la patrona del "nomadismo espiritual".

La fama de Matrona se debe a un episodio semi-legendario: se dice que en 1941 Stalin se reunió con ella cuando se produjo la invasión nazi de la Unión Soviética. Fue gracias a la adivina que el "padre del pueblo" optó por no huir y permaneció en Moscú, como ella le había ordenado. De este modo, colaboró para que Rusia y el mundo entero se salvaran del nazismo. De hecho, los iconos de Matrona y Stalin están muy extendidos, y en la nueva iglesia se ha colocado una urna con las reliquias de la beata.

La iglesia-yurta de Kundustug no es la primera de la república de Tuvá. Feofan de Corea consagró la primera en el año 2020. Se encuentra en el pueblo de Terlig-Khaj y está dedicada a la Epifanía de Nuestro Señor. Tal como sucedió en la iglesia que acaba de ser consagrada, la liturgia de aquella también fue seguida de un banquete festivo frente a la gran tienda de oración.

En la república de Tuvá, el budismo tibetano y el chamanismo tuvano están muy extendidos. La región cuenta con 10 parroquias ortodoxas rusas, que incluyen ocho iglesias y una capilla, dos yurtas, y una capilla en el campo de detención local (lager), donde prestan servicio siete sacerdotes y cuatro diáconos.