El hijo de Haftar busca apoyo 'militar y diplomático' en Israel

Habría hecho una escala el 1 de noviembre, cuando regresaba a Libia desde Dubai. Entregó un mensaje de su padre para pedir ayuda a cambio de normalizar las relaciones. Como telón de fondo fondo, los "Acuerdos de Abraham" y el equilibrio de alianzas en la región.

 


Jerusalén (AsiaNews / Agencias) - Saddam Haftar, hijo del señor de la guerra libio Khalifa Haftar, habría estado en Israel la semana pasada para mantener una reunión secreta con funcionarios del gobierno. Durante el encuentro, entregó un mensaje de su padre en el cual este pide ayuda "militar y diplomática" al estado judío a cambio de la normalización y oficialización de las relaciones entre los dos países.

El 1 de noviembre Saddam Haftar, que al parecer aspira a la presidencia de Libia en las elecciones del próximo 23 de diciembre, aterrizó en el aeropuerto Ben Gurion de Tel Aviv a bordo de un jet privado Dassault Falcon. Según Haaretz, habría hecho una escala en Israel cuando volaba de Dubai a Libia. Por el momento se desconoce con qué funcionarios se entrevistó el hijo del general libio, quien previamente habría contactado al departamento “Tevel” del Mossad, responsable de los países que no tienen relaciones oficiales con Israel.

Haftar llevaba un mensaje de su padre en el cual solicita "ayuda militar y diplomática" de Israel a cambio del compromiso de normalizar las relaciones, como sucedió hace un año con otras naciones del Golfo en el marco de los llamados "Acuerdos de Abraham". Hasta la fecha, Israel no tiene vínculos oficiales con Libia, antiguo partidario incondicional de la causa palestina durante el largo gobierno del dictador Muammar Gaddafi, derrocado (y asesinado) en 2011. Desde entonces, el país ha estado dividido entre administraciones rivales en el este y el oeste, cada una de ellas con el apoyo de grupos armados y gobiernos extranjeros.

El general Khalifa Haftar, que lanzó una ofensiva para conquistar Trípoli en 2019, cuenta con el apoyo de los Emiratos Árabes Unidos (EAU), Egipto y Rusia, mientras que las milicias con base en Trípoli están apoyadas por Qatar, Italia y Turquía. Hasta ahora, Israel no ha adoptado una postura pública clara sobre la guerra, a pesar de las acusaciones de que el estado judío están implicado entre bastidores en apoyo de Egipto y las naciones del Golfo. Ya el año pasado un alto funcionario del gobierno rebelde de Haftar pidió la ayuda de Israel afirmando que “nunca hemos sido ni seremos enemigos, y esperamos su apoyo. Sólo las circunstancias — dijo el viceprimer ministro Abdul Salam al-Badri a Makor Rishon— nos han mantenido separados hasta este momento”.