COP26: Greenpeace critica los datos sobre la deforestación de Yakarta
de Mathias Hariyadi

El gobierno de Indonesia afirmó que la tasa de tala de árboles ha descendido al nivel más bajo de la historia. Los activistas refutaron estas afirmaciones mostrando datos a largo plazo. Preocupación por los bosques de Papúa, que se redujeron por lo menos 19 mil hectáreas.

 


Yakarta (AsiaNews) - "Entre 2019 y 2020, la tasa de deforestación en Indonesia ha descendido a los valores más bajos de la historia", dijo el presidente de Indonesia, Joko "Jokowi" Widodo, en la COP26 de Glasgow. “Estos resultados son innegables”, agregó. Sin embargo, Greenpeace Indonesia cuestionó las afirmaciones del jefe de Estado.

Según los datos que presentó en la conferencia climática la ministra de Medio Ambiente Siti Nurbaya Bakar, en los últimos dos años se han talado poco más de 115.000 hectáreas de árboles: una reducción considerable frente a las más de 462.000 hectáreas de 2018.

Greenpeace ha mostrado los datos desde un ángulo diferente: si se observa el período comprendido entre 2003 y 2011, se puede ver que han talado 2,45 millones de hectáreas de bosque. Entre 2011 y 2019, la cifra ascendió a 4,8 millones de hectáreas. Un millón de árboles desaparecieron solo entre 2014 y 2015 cuando Jokowi asumió la presidencia.

Según Global Forest Watch, en 2001 Indonesia tenía 93,8 millones de hectáreas de bosque primario (el más antiguo, no afectado por actividades humanas): una superficie equivalente a Egipto. Aunque la tasa de deforestación comenzó a disminuir a partir de 2015, la selva tropical de Indonesia, la tercera más grande del mundo, sigue reduciéndose.

El activista de Greenpeace Kiki Taufik criticó a la Ministra de Medio Ambiente porque apoyó "desarrollos a gran escala que tienen un claro potencial de destrucción medioambiental". "Si no tomamos medidas inmediatas para detener la deforestación, no podremos alcanzar los modestos objetivos de reducción de emisiones", explicó Taufik.

En abril Greenpeace había organizado protestas para oponerse a la deforestación en Kaimana, en la provincia de Papúa Occidental, donde se está desmontando la tierra para dar lugar al cultivo intensivo de palma. Durante el gobierno de Yudhoyono (2009-2014), el exministro de Medio Ambiente Zulkifli Hassan permitió que 25 empresas operaran en los bosques de Papúa, que se redujeron por lo menos 19.000 hectáreas.

El tratado de deforestación firmado en la COP26 por más de 100 países, entre ellos Indonesia, compromete a los signatarios a "trabajar colectivamente para detener y revertir la pérdida de bosques y la degradación de la tierra para 2030, favoreciendo al mismo tiempo el desarrollo sostenible y promoviendo una transformación rural inclusiva".

Pero la ministra Siti Nurbaya Bakar ha dicho que "obligar a Indonesia a alcanzar el objetivo de deforestación cero es desacertado e injusto", porque "el desarrollo económico no se puede detener en nombre de las emisiones de carbono o la deforestación". No obstante, "la riqueza natural de Indonesia, incluidos los bosques, se debe gestionar según principios justos y sostenibles", añadió Bakar.