Rangún: protestas contra la visita del primer ministro de Camboya, Hun Sen

La población birmana se manifestó en varias ciudades del país contra la llegada del hombre fuerte de Phnom Penh. El presidente de Indonesia, Joko Widodo, reiteró que los generales de Myanmar deben seguir siendo excluidos de las reuniones de la Asean si no hay avances en el plan de paz.


Rangún (AsiaNews / Agencias) - Hoy termina la visita de dos días del primer ministro camboyano Hun Sen, acusado de legitimar el golpe de Estado de la junta militar birmana.

El hombre fuerte de Camboya y actual presidente de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), es el primer jefe de gobierno que visita la ex Birmania desde el golpe de Estado de febrero pasado y se reúne con el general Min Aung Hlaing.

A su llegada a la capital, Naypyidaw, Hun Sen fue recibido por los militares birmanos con la guardia de honor y alfombra roja, pero en medio de las protestas de la población. Más de 270 organizaciones reunidas en el Órgano de Coordinación de la Huelga General se opusieron a la visita acusándolo de "despreciar la voluntad del pueblo birmano y la revolución de la primavera” y en distintos lugares del país hubo manifestaciones contra su presencia en Myanmar.

En los días previos al viaje se produjeron explosiones cerca de la embajada de Camboya en Rangún y ayer en Depayin, a unos 300 kilómetros al norte de la capital, los manifestantes quemaron una imagen del primer ministro camboyano gritando: "No queremos al dictador Hun Sen".

Emerlynne Gil, subdirectora regional de investigación de Amnesty International, afirmó que, como presidente de turno de la ASEAN, Hun Sen debería centrarse en resolver la "terrible situación de los derechos humanos" en Myanmar.

El primer ministro camboyano, criticado también en su propio país por la mano de hierro que emplea contra los opositores políticos desde 1997, dijo que apoya el proceso de paz establecido por la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático.

En abril, la organización, que reúne a una decena de países de la región, había elaborado ​​un plan de cinco puntos para restaurar la paz y la democracia en Myanmar. Sin embargo, en el último año no ha habido ningún avance en este sentido y en octubre la ASEAN excluyó al general Min Aung Hlaing de sus cumbres cuando prohibieron al enviado especial de la organización que visitara en la cárcel a la ex presidenta democrática Aung San Suu Kyi.

Después de una conversación telefónica con Hun Sen, el presidente de Indonesia Joko Widodo (que en los últimos años ha desempeñado un papel de liderazgo en la ASEAN y ahora preside el G20), reiteró con un tuit que si no hay progresos significativos en el plan de paz solo deberían ser admitidos en las reuniones de la ASEAN los representantes no políticos de Myanmar.

En los últimos 11 meses el ejército birmano ha desplegado una violenta represión contra la oposición: los militares han matado al menos a 1.443 civiles y torturado arbitrariamente a los presos políticos.