Hafizabad: profanaron 50 tumbas ahmadíes
de Shafique Khokhar

Un grupo de musulmanes fundamentalistas removió los versículos coránicos de las lápidas y amenazó a la comunidad local con destruir sus casas. Algunos abogados habían intentado acusar al movimiento ahmadí de blasfemia. Según la Comisión de Derechos Humanos de Pakistán, estos episodios se están convirtiendo en algo "casi rutinario".


Hafizabad (AsiaNews) - Unas cincuenta tumbas ahmadíes fueron profanadas por la policía y algunos clérigos musulmanes. El incidente ocurrió el 6 de febrero en el cementerio del movimiento Ahmadí en Premkot, a unos 110 km de Lahore. El cementerio se construyó en 1974 y aloja una serie de lápidas que, según las normas de la comunidad ahmadí, -diferentes de las del Islam ortodoxo- presentan inscripciones y símbolos islámicos. Un grupo de extremistas vandalizó las tumbas que tenían grabados los versículos del Corán y amenazó a los ahmadíes locales con destruir sus casas si no eliminaban las inscripciones de las viviendas.

En Twitter, la oficina de prensa de la Jama'at Ahmadiyya Pakistani Community denunció la acción de los agentes de policía, calificándola como un acto que ha ensombrecido aún más la cara de Pakistán a los ojos de la comunidad internacional.

"La persecución contra la comunidad ahmadí en Pakistán no solo se dirige contra los que están vivos, sino que ni siquiera los muertos están a salvo en sus tumbas. La acción policial contra la comunidad ahmadí de Pakistán es una violación de los derechos humanos fundamentales", declaró Aamir Mahmood, vocero de la comunidad ahmadí de Punjab.

Antes de este incidente, los abogados Amir Nazir, Mehr Asif, Ali Raza y otros habían presentado una denuncia solicitando una investigación preliminar contra los ahmadíes en virtud de las leyes sobre blasfemia: la acusación es que escribieron versículos islámicos en las lápidas. Sin embargo, la policía no accedió a la petición.

La Comisión de Derechos Humanos de Pakistán (HRCP) señaló que estos incidentes se han convertido en "algo casi rutinario, dejando a los miembros de la Comunidad Ahmadí asediados, ya sea que estén vivos o muertos". La profanación de tumbas -continúa la organización- es una afrenta a la dignidad humana y no debe permitirse. Si el gobierno es sincero en su intento de hacer de Pakistán una sociedad más inclusiva, debe combatir y castigar todos estos actos".

En las redes sociales, varios activistas lanzaron una campaña contra la profanación de las tumbas, pidiendo al gobierno que tome medidas inmediatas y garantice la protección de las minorías religiosas. 

El movimiento Ahmadí fue fundado a fines del siglo XIX por Mirza Ghulam Ahmad, quien afirmaba ser el Mahdi y el Mesías esperado al final de los tiempos. Inmediatamente fue considerado herético por los círculos musulmanes ortodoxos y otras comunidades religiosas.

La comunidad ahmadi fue declarada ‘no musulmana’ por el Parlamento pakistaní en 1974. Una década más tarde se les prohibió definirse como musulmanes, predicar y viajar a Arabia Saudita para realizar el hajj, la tradicional peregrinación que los creyentes deben realizar al menos una vez en la vida. 

Los no musulmanes suman cerca de 10 millones en Pakistán, un país con una población de 220 millones. Hace una semana fueron atacados dos pastores cristianos, uno de los cuales murió. Muchos habitantes locales sostienen que la profanación del cementerio es el último episodio de una larga serie de gestos de intolerancia en un clima político turbulento, que plantea importantes interrogantes sobre la seguridad de las minorías en el país.