Camay Lam está gravemente enferma de cáncer. Para el Año Nuevo chino, realizó cientos de tarjetas de felicitación siguiendo un estilo de caligrafía artístico. La recaudación de la venta de las tarjetas se destinará a un centro juvenil en Vientián y a otros proyectos de la Vicaría Apostólica de Pakse. La mujer dijo al Sunday Examiner: "Estoy en manos de Dios. Lo más importante es hacer mi parte y continuar con la obra de evangelización".
Hong Kong (AsiaNews) - Un puente de solidaridad entre una parroquia de Hong Kong y la pequeña comunidad cristiana de Laos recibió un nuevo impulso en las últimas semanas gracias a la fuerza y el valor de una mujer gravemente enferma de cáncer. La historia fue publicada por el semanario católico de Hong Kong Sunday Examiner: Camay Lam lleva dos años sometiéndose a una intensa quimioterapia que le ha provocado graves efectos secundarios. Pero esto no ha frenado su deseo de dedicarse a los más necesitados. Con motivo del último Año Nuevo chino, elaboró mil tarjetas de felicitación siguiendo el estilo artístico de la caligrafía china. Para ello, trabajó en colaboración con el padre Nicolas de Francqueville, de las Missions Etrangères de Paris (MEP) y párroco de la Iglesia del Santo Redentor de Hong Kong. El dinero recaudado a través de la venta sirve para sostener algunas obras de la Iglesia en Laos.
"El tiempo de nuestras vidas es un regalo de Dios que debemos aprovechar", explicó Camay Lam al Sunday Examiner. Y agregó: los caracteres "paz" y "alegría" de las tarjetas "son lo más importante para todos. Esto es algo que los enfermos de cáncer y yo entendimos luego de enfermar". Cuando habla de su enfermedad, dice que su corazón está tranquilo: "Lo más importante ahora es hacer mi parte y continuar con la obra de evangelización. Cuando dibujo o pinto, me concentro y pienso en lo que Dios quiere que exprese. Y me siento más cerca de él”. Por eso también abrió una página de Facebook titulada Huella de la Gracia, a través de la cual difunde su mensaje.
La iniciativa de Hong Kong con motivo del Año Nuevo chino consiguió recaudar 110.000 dólares hongkoneses (unos 12.800 euros) para la Iglesia de Laos, aún a pesar de las dificultades relacionadas con la nueva ola de la pandemia que asola la ciudad. En una carta, el P. Andrew Souksavath Nouane Asa, administrador apostólico de la Vicaría de Pakse, expresó su gratitud al P. Francqueville, a la Parroquia del Santísimo Redentor y a todas las personas que colaboraron con la iniciativa. El padre Guillaume Lepesqueux, otro misionero de MEP, gestiona los fondos en Laos. Los donativos serán destinados al Centro Nazaret de Vientián, creado por la hermana Anne Latsamy Thavivanh y otras religiosas de las Hermanas de la Caridad de Santa Juana Antida Thouret. En la actualidad ofrece alojamiento a más de 50 jóvenes. Veinte de ellas, en su mayoría niñas de familias con bajos ingresos que no pueden financiar sus estudios, reciben formación profesional en costura. Algunas trabajan y otras continúan sus estudios en la escuela secundaria o en la universidad.
Los fondos también servirán para la construcción de una iglesia en Pakse y para ayudar a las familias de bajos ingresos. Durante la Cuaresma del año pasado, la Iglesia del Santísimo Redentor recaudó 70.000 dólares hongkoneses (unos 8.000 euros) para la Iglesia de Laos, que se destinaron al seminario San Juan María Vianney de Thakhek, a la renovación de una iglesia en Pakse y al Centro Nazaret de Vientián.