El Papa recibe a Aoun: posible preludio de un viaje al Líbano
de Fady Noun

La visita constituye una señal positiva a la comunidad internacional. Y una confirmación indirecta de que todo procede normalmente para las elecciones políticas del 15 de mayo. Se tratarán los temas de actualidad en el país de los cedros y en la región, desde la cuestión iraní hasta la guerra en Ucrania.

 


Beirut (AsiaNews) - En el curso de su viaje oficial a Italia, previsto del 20 al 22 de marzo, el jefe de Estado Michel Aoun realizará una visita oficial al Vaticano el 21 de marzo y será recibido por el Papa Francisco, informa una comunicado de prensa que se dio a conocer en las últimas horas. El tema central del encuentro, explica una fuente cercana a la presidencia, “serán los detalles del esperado viaje del Papa al Líbano el próximo mes de septiembre”. “El presidente Aoun irá al Vaticano -continúa la fuente- para invitar al Papa y para hablar sobre la situación en el Líbano”, además de agradecerle “sus oraciones y todo lo que ha hecho la Santa Sede para garantizarle al Líbano una cobertura diplomática”.

Aoun, informa el comunicado, será recibido en audiencia por el Papa el 21 de marzo. Luego mantendrá una reunión de trabajo con el cardenal Pietro Parolin, número dos del Vaticano, y con el secretario para las Relaciones con los Estados, el arzobispo Paul Richard Gallagher.

Al día siguiente, el jefe de Estado será recibido por el presidente italiano Sergio Mattarella, a quien felicitará por su reelección el 29 de enero pasado. Regresará al Líbano esa misma tarde.

Un anuncio sorpresivo

El anuncio de la próxima visita del jefe de Estado a Italia fue sorpresivo. La fecha fue anunciada simultáneamente en Beirut, en el Consejo de Ministros y en Roma por Farid Élias el-Khazen, embajador del Líbano ante la Santa Sede. El diplomático recordó que la visita del presidente Aoun sigue al viaje que Mons. Gallagher realizó al país de los cedros a finales de febrero. La atención de la Santa Sede, como la de todo el mundo, señaló Khazen, está centrada actualmente en la guerra de Ucrania, pero la preocupación del Papa y del Vaticano por la situación en el Líbano sigue siendo constante "a todos los niveles", sean cuales sean los acontecimientos futuros.

Algunos observadores consideran que la visita al Vaticano del jefe de Estado representa una señal positiva dirigida a la comunidad internacional y confirma -aunque indirectamente- la clara intención de las autoridades de cumplir el programa establecido, con las elecciones políticas previstas para el 15 de mayo y la formación de un nuevo gobierno, las dos condiciones fundamentales para garantizar la estabilidad política interna del país. Elemento que la Santa Sede considera indispensable para una eventual visita del Santo Padre al Líbano.

Distorsión de la posición del Vaticano

En el clima preelectoral, caracterizado por el aumento de las polémicas y los enfrentamientos entre las facciones políticas libanesas, el embajador Khazen condenó los intentos de quienes pretenden manipular en la prensa la posición del Vaticano acreditando predisposiciones imaginarias a favor o en contra de un determinado partido político.

Fuentes diplomáticas occidentales explican que es una referencia a noticias periodísticas según las cuales el arzobispo Gallagher habría recomendado, durante su visita al Líbano, la eliminación de Hezbolá de la lista de organizaciones terroristas. Una lista elaborada por Estados Unidos y aprobada por sus aliados europeos.

En realidad, recuerda el embajador libanés contactado ayer por L’Orient-Le Jour, Mons. Gallagher se limitó a afrimar que la Santa Sede está "dispuesta a desempeñar el papel de mediador en un diálogo entre los partidos políticos, siempre que todas las partes interesadas presenten una solicitud oficial".

El futuro del Líbano

Por otra parte, durante su visita Mons. Gallagher no ocultó su preocupación por la situación del país y de la región, que "no pueden garantizar el futuro del Líbano". Pidió luego a algunos países que "dejen de utilizar al Líbano y a Medio Oriente en función de intereses externos". “Cualquier debilitamiento de la presencia cristiana - lamentó el prelado - destruirá el equilibrio interno y la identidad del Líbano”. Una opinión compartida por el nuncio apostólico, Mons. Josef Spiteri, quien augura una "mayor colaboración entre los candidatos cristianos" ante esta amenaza inminente. “Con la tragedia de Ucrania, todo resulta más difícil”, agregó el nuncio. "La ayuda, la atención de la comunidad internacional, la crisis en Oriente Medio, el diálogo entre Estados Unidos e Irán, la suerte de los desplazados sirios... El presidente Aoun -concluye el nuncio- abordará sin duda todos estos temas durante su encuentro con el Santo Padre, el card. Parolin y Mons. Gallagher".