Corea del Sur: ¿se acabó el boom de los católicos?

Según los datos del anuario estadístico publicado por la Conferencia Episcopal, el número no crecerá más de un 0,2% en 2021, frente al 3% de hace unos años. Los católicos representan el 11,3% de la población total, pero se observa un aumento de la edad promedio de los fieles y una caída en el número de nuevas vocaciones al sacerdocio. Aún así, es significativa su contribución a la misión, con 1115 misioneros coreanos que ejercen su ministerio en 80 países de todo el mundo.


Seúl (AsiaNews) - El impetuoso crecimiento de la comunidad católica coreana parece haberse detenido. La curva cambia, frenada por el Covid-19, pero también por el declive demográfico y las transformaciones sociales que viven las nuevas generaciones en Seúl. Así lo revelan los datos del anuario estadístico de la Conferencia Episcopal de Corea del Sur, el informe anual que, desde 1954, muestra una instantánea de las cifras de las comunidades locales al 31 de diciembre del año anterior. Las tablas publicadas en estos días también muestran una caída en las ordenaciones sacerdotales, mientras que en todas las diócesis de la península se registra un aumento de la edad promedio de los fieles. 

Hasta hace pocos años, el anuario estadístico de la Iglesia coreana era el documento que certificaba el avance del catolicismo en Seúl. A principios de la década del 2000, la tasa de crecimiento del número de fieles todavía superaba con creces el 3% anual. Sin embargo, en el último tiempo se notó que el número de bautismos había comenzado a disminuir, y el fenómeno se acentuó aún más con la llegada del Covid-19. Según los últimos datos publicados, al 31 de diciembre de 2021, los católicos coreanos eran 5.938.045, es decir. el 11,3% de la población del país. En comparación con los doce meses anteriores, el balance es positivo, con 14.745 creyentes más (+0,2%). Cabe recordar que desde el año 2020, Corea del Sur registra un descenso del número de nacimientos, con la consiguiente disminución del número total de habitantes. Aún así, el número de bautizados ha aumentado un decimal con respecto al año pasado pero se trata de un crecimiento mucho menor que el +0,8% del 2019, el año anterior a la pandemia.

El Covid-19 también impactó fuertemente en la participación de los fieles en la misa dominical. A diferencia del 18,3% de 2019, la tasa de participación pasó a ser del 8,8%.. Este descenso es muy evidente en las diócesis de las áreas metropolitanas, las más afectadas por la propagación del contagio.

Pero el dato que más preocupa a la comunidad católica coreana es la edad promedio de sus fieles. El 23% de los bautizados es mayor de 65 años y no hay ninguna diócesis en la que este grupo etario represente menos del 20% de la comunidad. Por otra parte, en el segmento etario de 20 a 24 años, los católicos representan el 9,2% -más de dos puntos porcentuales menos que su participación en la población total, que es del 11,3%.

La edad promedio del clero coreano también va en aumento: en la diócesis de Corea del Sur sólo hubo 93 ordenaciones sacerdotales en 2021, el año con menos sacerdotes noveles en la última década. El 30% de los sacerdotes coreanos tienen ahora entre 40 y 50 años. Y el futuro próximo no promete invertir la tendencia. 

En 2021, de hecho, había 883 estudiantes en los seminarios diocesanos y otros 254 en órdenes religiosas. Si se suman ambos datos, se observa una caída del 28,4% respecto a los 1317 seminaristas registrados en el anuario de 2011.

Sin embargo, hay un dato que evidencia la vitalidad plena de la Iglesia católica coreana: su apertura a la misión "ad gentes". En un país con apenas 5.626 sacerdotes, los misioneros coreanos siguen saliendo de su tierra para dirigirse a todo el mundo. Hoy, los misioneros suman 1.115, y entre ellos hay 237 sacerdotes, 57 religiosos, 815 monjas y 6 laicos. Desarrollan su ministerio en 80 países diferentes y el año pasado abrieron nuevas presencias misioneras en Liberia, Egipto, Venezuela y Pakistán.